YAKARTA/LONDRES, 27 Jul. (Reuters/EP) -
El primer ministro de Reino Unido, David Cameron, ha advertido este lunes que está dispuesto para ordenar ataques aéreos contra las milicias islamistas en Libia y Siria para prevenir atentados en las calles de su país, en un paso más hacia su lucha contra los rebeldes del Estado Islámico.
El Ejecutivo británico participa en los ataques aéreos liderados por Estados Unidos contra las posiciones de Estado Islámico en Irak. Además, Cameron está dispuesto a conseguir el respaldo parlamentario a finales de 2015 para extender la campaña aérea a Siria. Sin embargo, hasta este lunes, no había planteado bombardeos sobre Libia. Según 'The Sunday Telegraph', el primer ministro y sus consejeros han discutido sobre cómo podrían ayudar a derrotar a las milicias islamistas en Libia si se crea un gobierno estable.
"Si hay una amenaza a Reino Unido o a nuestra gente en nuestras calles (...) llevaremos a cabo una acción inmediata para acabar con ella", ha explicado Cameron durante su visita a Indonesia en misión comercial, que espera aprovechar para forjar nuevas alianzas políticas con el fin de contrarrestar una amenaza que ha descrito como "culto a la muerte".
"Como primer ministro, intentaré tomar y tomaré medidas, y así será tanto si el problema viene de Libia, de Siria o de cualquier otro sitio", ha asegurado. El Gobierno británico elevó la alerta nacional de terrorismo al segundo nivel más alto en agosto de 2014, debido a una "alta probabilidad" de que se produjese un ataque en su territorio.
Tras su discurso, Cameron se ha reunido con el presidente indonesio, Joko Widodo, para abordar la manera en la que los dos países podrían cooperar en la lucha contra el grupo terrorista. La amenaza islamista es una de las prioridades de la agenda política del Ejecutivo del país anglosajón después de que un hombre matase a 30 turistas británicos en un hotel de Túnez el pasado mes de junio. El ataque fue reivindicado por Estado Islámico y, según el Gobierno tunecino, el terrorista había sido entrenado en un campo yihadista en Libia.