LONDRES, 15 Jun. (EUROPA PRESS) -
El primer ministro de Reino Unido, David Cameron, ha ratificado este viernes que el Gobierno de Bashar al Assad ha usado el gas sarín en al menos dos ataques para reprimir el avance de los combatientes rebeldes en la ciudad de Alepo y de Damasco entre el 19 de marzo y el 13 de abril. Sin embargo, el 'premier' británico ha insistido en que no suministrará armamento a los rebeldes sirios.
En base a los datos recabados por el Comité Conjunto de Inteligencia británico, Cameron ha sostenido que hay "pruebas creíbles de múltiples ataques con armas químicas en Siria, incluido el uso del aberrante agente sarín". "Estimamos que la escala del uso (del gas sarín) es aprobado y ordenado por el régimen de Al Assad", ha sentenciado Cameron.
El primero de los ataques, el 19 de marzo, se produjo en el distrito de Utaybah, un barrio periférico de Damasco, mientras que el segundo se registró el 13 de abril en Alepo, en el distrito kurdo de Sheij Maqsud.
Por contra, Cameron ha asegurado que no se ha hallado pruebas "creíbles" que constataran el uso de armas químicas por parte de los rebeldes sirios, a diferencia de las milicias islamistas vinculadas a la organización terrorista Al Qaeda.
"Valoramos que elementos afines a Al Qaeda en la región han intentado agenciarse con armas químicas para su uso en Siria", ha remarcado el primer ministro británico.
ARMAR A LOS REBELDES
No obstante, Cameron ha confirmado que el Gobierno británico "no ha tomado la decisión de armar" al Ejército Libre Sirio (ELS), si bien levantará el embargo de armas impuesto a Siria para que los rebeldes puedan recibir armamento del extranjero.
"La información sobre armas químicas demuestra aún más la locura de tener un embargo que da algún tipo de equivalencia moral al presidente Al Assad y a la oposición legitimada", ha argumentado el 'premier' británico, quien ha insistido en que Londres se apresta a "entrenar, apoyar y ayudar a la oposición".
A su juicio, Reino Unido debe "implicarse" con la oposición que tiene una "visión plural, democrática y positiva del futuro de Siria", a la espera de que se celebre una conferencia internacional sobre la transición pacífica en el país, según ha informado el diario británico 'The Guardian'.
Cameron, que ha señalado que más de 100.000 han muerto en Siria desde el comienzo de los levantamientos contra el Gobierno de Al Assad en marzo de 2011, ha aseverado que comparte la postura "franca" de Estados Unidos sobre el conflicto en Siria.
DEMANDAS REBELDES
El suministro de baterías antiaéreas y antitanque, así como la instauración de una zona de exclusión aérea en Siria son las principales demandas del ELS, tal y como ha aseverado el comandante general rebelde, Salem Idriss.
Mientras Estados Unidos y Francia descartan imponer una zona de exclusión aérea como la establecida en 2011 sobre Libia, París y Londres sí ha manifestado su intención de permitir el suministro de armas a los rebeldes, algo que no cuenta con demasiados apoyos en el seno de la Unión Europea.
Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Sergei Lavrov, ha advertido este viernes de que la entrega de armas a los rebeldes sirios podría empeorar la situación regional y ha desdeñado las pruebas por las que la Casa Blanca concluye que el Ejército sirio ha empleado armas químicas contra la población siria.
Más de 93.000 personas han muerto en el país a causa de los combates y la represión desde que comenzaran los levantamientos contra el Gobierno de Al Assad en marzo de 2011. La situación humanitaria en Siria continúa agravándose, al tiempo que la ola de refugiados que cruzan las fronteras sirias se intensifica. Más de 1,6 millones de sirios permanecen en los campos levantados en Líbano, Jordania, Turquía e Irak.