PARÍS, 25 Sep. (Reuters/EP) -
Los camioneros franceses han protestado este lunes contra la reforma laboral impulsada por el presidente de Francia, Emmanuel Macron, y han bloqueado el acceso a diez depósitos de combustible, lo que ha desatado el caos entre la población por la falta de suministro en algunas gasolineras.
Una portavoz de la Unión Francesa de Industrias Petroleras (UFIP) ha explicado que el bloqueo de los depósitos de gasolina ha provocado que "los conductores entraran en pánico y llenaran sus coches por si acaso". La portavoz ha detallado que como consecuencia un tres por ciento de las 11.000 gasolineras que hay en Francia se han quedado sin suministro durante la jornada.
Al principio de la jornada, los manifestantes de los sindicatos Conferencia General del Trabajo (CGT) y Fuerza Obrera (FO) formaron una barricada frente a la refinería de La Mede, en el sur de Francia, y en el oeste del país se bloquearon varias gasolineras cercanas a las localidades de Burdeos y La Rochelle, aunque también se han desarrollado acciones de protesta en las inmediaciones de París y en el norte de Francia.
La ministra de Transporte francesa, Élisabeth Borne, ha indicado su intención de reunirse con los sindicatos el próximo jueves para intentar resolver sus diferencias, pero las organizaciones han respondido que su oferta es inadecuada y que los camioneros retomarán la huelga el martes.
"Siempre estamos dispuestos a hablar (...) pero hasta que no tengan una propuesta concreta que plantearnos, seguiremos protestando", ha manifestado en declaraciones a Reuters la líder de FO, Patrice Clos.
Las autoridades francesas han desplegado a las fuerzas de seguridad para garantizar que las perturbaciones no iban a más. Las movilizaciones no parecen haber surtido ningún efecto en las intenciones de Macron, que firmó cinco decretos incluidos en la norma el pasado viernes y que ha asegurado que la reforma laboral se convertirá en ley en los próximos días, aunque no tendrá efecto en la práctica hasta que se afinen sus detalles, a finales de año.
Sin embargo, la opinión pública se ha mostrado crítica con el paquete de medidas propuesto por Macron para revitalizar el modelo económico y social de Francia y reducir el déficit presupuestario, lo que se ha materializado en una pérdida de popularidad del presidente. El domingo sufrió su primer revés electoral cuando su partido ganó menos escaños de los que esperaba en las elecciones al Senado francés.