Carla del Ponte abandona la comisión de investigación sobre Siria por falta de apoyo del Consejo de Seguridad

GINEBRA, 6 Ago. (Reuters/EP) -

La prestigiosa abogada suiza Carla del Ponte, uno de los grandes nombres del derecho humanitario, ha declarado su intención de abandonar la comisión de investigación independiente de la ONU en Siria tras acusar al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas de no aportar ninguna voluntad política para resolver el conflicto.

"Estoy renunciando a esta comisión que no está respaldada por ninguna voluntad política. No tengo poder mientras el Consejo de Seguridad no haga nada", ha denunciado Del Ponte. "Estamos incapacitados, no hay justicia para Siria" ha dicho la abogada, que asegura que su papel en la comisión es solo "una coartada".

Del Ponte, antigua fiscal jefe del Tribunal de derecho penal internacional de Naciones Unidas, se unió a la comisión de investigación de Siria en septiembre de 2012 junto a los expertos en Derechos Humanos, el brasileño Paulo Sérgio Pinheiro y la estadounidense Karen Koning AbuZayd.

"Lo que hemos visto en Siria nunca lo vi en Ruanda, en la antigua Yugoslavia o en los Balcanes, es realmente una gran tragedia. Desafortunadamente no tenemos tribunal" ha aseverado Del Ponte, una fiscal de trayectoria respetadísima que llegó incluso a comunicar las sospechas de la ONU de que los rebeldes sirios estaban empleando gas sarín, terminantemente prohibido.

Desde que en agosto de 2011 fuese creada la comisión, han denunciado ataques con armas químicas, un genocidio contra la población Yazidi de Irak, tácticas de asedio y el bombardeo del Ejército sirio a convoyes de ayuda huminitaria, entre otras violaciones de los derechos humanos.

Naciones Unidas está creando un nuevo órgano para preparar los enjuiciamientos, pero hasta ahora las denuncias de los expertos no han tenido respuesta y no prevén que se vaya a ningún tribunal para juzgar los crímenes de guerra cometidos durante los seis años y medio de conflicto ni que el Consejo de seguridad tenga intención de trasladar la situación al Tribunal de La Haya.