MADRID, 27 (EUROPA PRESS)
El rey Carlos III ha recibido este lunes a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, en el marco de su visita a Reino Unido para anunciar un acuerdo con el primer ministro británico, Rishi Sunak, sobre el protocolo para Irlanda del Norte.
"Al rey le complace reunirse con cualquier líder mundial que visite Reino Unido y es el consejo del Gobierno que lo haga", ha manifestado un portavoz del Palacio de Buckingham, según ha informado la cadena de televisión británica BBC.
Tras ello, Downing Street ha incidido en que la decisión del rey de reunirse con Von der Leyen depende "fundamentalmente" del Palacio de Buckingham y ha agregado que el primer ministro Sunak "cree firmemente que depende del rey tomar estas decisiones".
"No es algo poco común que Su Majestad acepte invitaciones para reunirse con ciertos líderes", ha indicado, tras recordar las recientes audiencias mantenidas por Carlos III con los presidentes de Polonia y Ucrania, Andrzej Duda y Volodimir Zelenski, respectivamente.
Tanto la Casa Real como el Gobierno británico responden así a las críticas a la recepción de Von der Leyen por parte del monarca procedentes principalmente del sector más duro de los 'brexiteers', que consideran que se está implicando a Carlos III en una cuestión política que genera división.
"Es sorprendente que el Rey reciba a Ursula von der Leyen hoy ya que defiende posiciones contrarias a las del primer ministro. También es imprudente desde el punto de vista constitucional implicar al Rey en una cuestión política controvertida", ha apuntado el exministro Jacob Rees-Mogg antes del encuentro.
Otra dirigente 'brexiteer', Jacqueline Foster, ha criticado también la recepción. "No me puedo creer que el Número 10 (de Downing Street) haya pedido a Su Majestad el Rey que se implique en la finalización de un acuerdo tan polémico como este", ha afirmado. "Es burdo y sentará muy mal en Irlanda del Norte. Debemos recordar que esta no ha sido una decisión del Rey, sino del Gobierno, que parece estar totalmente sordo", ha añadido.
Una portavoz de la Comisión Europea, Dana Spinant, subrayó antes de producirse el acuerdo que el encuentro "no forma parte del proceso".