WASHINGTON 28 Nov. (Reuters/EP) -
La Casa Blanca ha afirmado este lunes que no existen pruebas de un fraude masivo en las elecciones presidenciales del pasado 8 de noviembre, en respuesta a las alusiones del presidente electo, Donald Trump, y a las impugnaciones promovidas en tres estados.
Trump declaró este domingo que, además de imponerse en el Colegio Electoral "de forma abrumadora", también habría ganado en voto popular si se hubieran restado las papeletas de las millones de personas que votaron de forma "ilegal".
El portavoz de la Presidencia norteamericana, Josh Earnest, ha evitado referirse de forma concreta a los 'tuits' de Trump pero sí que ha negado posibles irresulgaridades. "Lo que puedo decir, como algo objetivo, es que no hay evifdencias que apoyen una reivindicación así", ha asegurado.
El Partido Verde solicitó la semana pasada un recuento en Wisconsin --al que se han sumado abogados de la candidata demócrata, Hillary Clinton-- y este lunes ha emprendido medidas similares en Pensilvania, según el portal de noticias 'Politico'. Los recursos también se extenderán al estado de Michigan.