MADRID 2 Ago. (EUROPA PRESS) -
Casi treinta expresidentes iberoamericanos, entre ellos los españoles José María Aznar y Mariano Rajoy, han pedido este viernes a Colombia y Brasil que reconozcan al candidato opositor venezolano Edmundo González como presidente electo de Venezuela.
"La cuestión planteada, a la luz del tiempo transcurrido --con violación de las mismas leyes electorales-- sin que el poder electoral haya presentado algún boletín soportado con actas y por colegios electorales, es que la prueba de la elección existe y la ha presentado el candidato que objetivamente ha ganado la elección", han indicado en un comunicado conjunto.
Los expresidentes han señalado en un comunicado publicado por la Iniciativa Democrática de España y las Américas (IDEA) que "lo único que cabe es el reconocimiento, previa verificación por los organismos internacionales técnicos en material electoral, de la condición de presidente electo de Venezuela de Edmundo González Urrutia".
"Es muy grave y elemento de juicio determinante para concluir en lo anterior que el comportamiento del Gobierno venezolano es el reprimir, con saldo de muertos, heridos, encarcelados y desaparecidos, a su pueblo, que solo reclama el respeto de su dictado soberano, a la vez que ordena el encarcelamiento del presidente electo y la líder Machado que lo apuntala", han agregado.
De la misma forma, han resaltado que el proceso electoral estaba "minado" y "lleno de limitaciones impuestas por el poder electoral, como la ausencia de una observación internacional experta". Como ejemplo, han puesto "la expulsión de delegaciones de acompañantes".
El Consejo Nacional Electoral (CNE) ha concedido al presidente venezolano, Nicolás Maduro, la victoria por segunda vez este viernes en las elecciones con el 51,95 por ciento de los votos frente al 43,18 por ciento obtenido por la candidatura de González.
Una vez conocidos los primeros resultados el lunes, la oposición salió rápidamente al paso para reivindicar su victoria --que aseguran lograron con más de un 70 por ciento de los votos-- y exigir un recuento de actas respaldado a nivel internacional.