El organismo dice que los enfrentamientos han dejado además cerca de 185.000 desplazados internos en Somalia
MADRID, 17 Feb. (EUROPA PRESS) -
Alrededor de 60.000 somalíes, principalmente mujeres y niños, han buscado refugio en Etiopía durante las últimas semanas tras huir de los recientes combates en la ciudad de Las Anod entre las tropas de la región semiautónoma de Somalilandia y milicias locales, según datos facilitados este viernes por el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).
La portavoz de ACNUR Olga Sarrado Mur ha indicado en rueda de prensa desde Ginebra que "más de la mitad" de estas personas han llegado a la región etíope de Somali a principios de esta semana. "Exhaustas y traumatizadas, han llegado con muy poco, llevando consigo sólo lo que podían trasladar", ha manifestado.
"Las mujeres han relatado al personal de ACNUR que tuvieron que vender sus pertenencias para pagar el transporte a lugar seguro. Muchas de ellas han perdido a seres queridos en los enfrentamientos o se han visto separadas de ellos durante la huida", ha manifestado, antes de detallar que las familias han sido "asentadas temporalmente" en trece instalaciones en Buj, Halhamur y Danot Woredasiin.
Así, ha detallado que "en una zona extremadamente remoto y con una presencia humanitaria limitada, las comunidades locales de Dulo han dado la bienvenida de forma generosa, compartiendo los recursos que tienen", si bien ha advertido de que estos recursos "se están agotando rápidamente, ya que una media de mil personas sigue cruzando cada día la frontera con Etiopía".
"Los refugiados son acogidos en algunas de las zonas del país más afectadas por la sequía y el impacto del cambio climático, tras cinco temporadas fallidas de lluvias consecutivas y donde los recursos ya están bajo mucha presión", ha manifestado Sarrado Mur, que ha destacado que los refugiados tienen "opciones limitadas" que les han llevado a buscar cobijo en escuelas y otros edificios públicos, mientras que otros duermen al raso.
En esta línea, ha hecho hincapié en que "muchas" de estas personas "necesitan urgentemente comida y apoyo nutricional, agua e instalaciones de higiene, así como apoyo especializado para personas con necesidades especiales", motivo por el que ACNUR trabaja con las autoridades etíopes y regionales para "erigir centros temporales de recepción y dar ayuda inmediata, incluidas sábanas, alimentos, cubos, material de cocina y redes antimosquitos.
"A su llegada, los refugiados son sometidos a una revisión médica y registrados de forma inicial antes de su reubicación a las comunidades circundantes o los lugares designados", ha explicado la portavoz de ACNUR, que ha recordado que en Somalia hay también más de 185.000 desplazados internos que han huido desde principios de febrero de la ciudad de Las Anod.
En este caso, la organización entregará a través de sus socios ayuda a 3.000 familias, mientras que se está movilizando ayuda en efectivo para 42.000 personas durante un periodo de tres meses "una vez que la situación de seguridad permita el acceso a la zona". "ACNUR pide a todas las partes que respeten la seguridad de los civiles y más financiación para satisfacer las necesidades de los nuevos desplazados", ha remachado.
Los combates estallaron el 6 de febrero en Las Anod, centro administrativo de la región de Sool entre las fuerzas de Somalilandia y grupos milicianos después de que los líderes locales representados en la llamada Autoridad de Unidad y Salvación de las regiones de Sool, Sanaag y Cayn (SSC) declararan su intención de volver a unirse a la Somalia federal.
Somalilandia declaró su independencia de Somalia en 1991, pero no ha obtenido un amplio reconocimiento internacional por su estatus y ha enfrentado la oposición de algunos ancianos de clanes en áreas en disputa a lo largo de su frontera con el estado semiautónomo de Puntlandia, en Somalia. Ante esta situación, el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Volker Turk, ha pedido una investigación "creíble e imparcial" sobre los enfrentamientos.