Archivo - El presidente de Chile, Gabriel Boric - Europa Press/Contacto/Matias Basualdo - Archivo
La responsable del Interior de Chile recibe una llamada de disculpas de la ministra Bullrich: "Damos por superado y resuelto el tema"
MADRID, 17 (EUROPA PRESS)
Las autoridades de Chile han protestado formalmente ante el Gobierno argentino por las recientes polémicas declaraciones de la ministra de Seguridad Nacional de Argentina, Patricia Bullrich, sobre la presunta presencia del partido-milicia chií libanés Hezbolá en el país andino.
El jefe de la División de América del Sur del Gobierno chileno, Christian Hodges-Nugent, ha sido el encargado de entregar la nota de protesta al 'número dos' de la Embajada argentina en Santiago, Javier Lareo, según han confirmado fuentes del Ministerio de Exteriores de Chile.
De esta forma, el Ejecutivo chileno confirma lo adelantado en la víspera por el presidente Gabriel Boric, que había señalado que entregaría una nota de protesta y exigió "respeto para con nuestro país", a la par que instó a Buenos Aires a no lanzar acusaciones que creen "antecedentes así al tuntún".
Sin embargo, poco después de que Chile remitiera esta protesta formal, la ministra del Interior chilena, Carolina Tohá, ha informado de que ha recibido una llamada de disculpa por parte de la ministra Bullrich, quien ha expresado "sus excusas por al forma en que esto se planteó", con lo que desde Santiago dan ya por "superado y resuelto" este asunto, según recoge la cadena de noticias T13.
"Recientemente recibí una llamada de la ministra Patricia Bullrich, quien expresó sus excusas por la forma en que esto se planteó, dejó claro que no hay antecedentes de una amenaza para el país en esta materia, y quedamos de acuerdo (...) que vamos a profundizar la conversación respecto de cómo podemos afianzar una mayor colaboración entre los países", ha dicho Tohá.
La polémica se desató a comienzos de semana después de que la citada ministra argentina asegurara que había algunas regiones extranjeras cercanas a territorio de Argentina --como Iquique, en el norte de Chile; la ciudad brasileña de Sao Paulo o en Perú-- en las que supuestamente había presencia de aliados de Hezbolá.
Aquellas declaraciones despertaron malestar en el Gobierno chileno y este mismo miércoles, antes de las declaraciones de Tohá, el viceministro del Interior, Manuel Monsalve, ha llegado a asegurar que las palabras de la ministra Bullrich parecieran tener el objetivo de "dañar la imagen" de Chile.
"De manera bastante casual, durante los últimos días, algunos senadores estadounidenses y la ministra del Interior argentina han reflotado temas en materia de organizaciones terroristas. De manera muy casual, muy coincidente, incluso pareciera muy articulado. Uno se pregunta si el objetivo de esa provocación es la seguridad del continente o es dañar la imagen del país", ha señalado Monsalve.
CARTA AL CONGRESO DE EEUU
La pasada semana el subcomité de Relaciones Exteriores del Hemisferio Occidental del Senado de Estados Unidos discutió este tema a petición del republicano Marco Rubio, quien además señaló a las autoridades chilenas por haberse "abstenido de designar a Hezbolá como organización terrorista".
En este contexto, el embajador chileno en Estados Unidos, Juan Gabriel Valdés, ha informado de que ha enviado una misiva al Congreso estadounidense en la que carga contra el senador Rubio por lo que considera es "un insulto a los chilenos", recoge el diario 'La Tercera'.
Según el representante diplomático chileno, los cuestionamientos de Rubio "carecen de cualquier base de hecho y son seriamente engañosos", a la par que constituyen "una falta de respeto de una democracia a otra que tiene una historia de trabajo conjunto muy desarrollada".
Aquellas declaraciones de Rubio fueron también contestadas durante el subcomité de Exteriores por el subsecretario adjunto del Departamento de Estado para América Latina y el Caribe, Mark Wells, que defendió a Boric como "un firme defensor de las cuestiones de Derechos Humanos en todo el mundo".