SANTIAGO, 18 Ene. (Reuters/EP) -
El Comité de Ministros chileno ha decidido este lunes mantener la calificación ambiental favorable para el desarrollo de la central hidroeléctrica en el río Cuervo, en el extremo sur del país, pese a los reclamos de particulares y organizaciones ciudadanas que advierten del "gran impacto" que generaría esta construcción sobre la biodiversidad de la Patagonia.
"El próximo paso será recurrir a los tribunales ambientales para revertir esta errónea decisión (...). Esperamos que los tribunales remedien lo ocurrido hoy", ha afirmado un abogado de la ONG Fiscalía del Medio Ambiente (FIMA), Diego Lillo.
El Comité de Ministros ha mantenido su decisión tras analizar los once recursos de reclamación presentados por particulares y organizaciones ciudadanas en contra de la Resolución de Calificación Ambiental (RCA), aprobada en septiembre de 2013.
Los opositores al proyecto advierten de que la central hidroeléctrica se situaría en las cercanías de una falla geológica, rodeada de volcanes. "Tomar una decisión sobre un embalse de 13.000 hectáreas en una zona de alto riesgo como es la falla Liquiñe-Ofqui, rodeada de volcanes (...) es una irresponsabilidad", ha dicho el coordinador de la Coalición Ciudadana por Aysén Reserva de Vida, Peter Hartmann, quien además ha calificado la resolución del Gobierno como una "burla".
No obstante, la infraestructura no solo resulta peligrosa para la población de la zona, sino de alto impacto para la biodiversidad de la Patagonia donde se emplazarían las presas, según han señalado estas organizaciones.
En este sentido, el Comité de Ministros ha adoptado parcialmente algunas de las reclamaciones relacionadas con la flora y fauna acuática y terrestre de la zona, incrementándose el cuidado de algunas especies. Además, se reforzarán los planes de monitorización asociados al llenado de los embalses.
El proyecto, impulsado por Energía Austral (sociedad integrada por la minera Glencore y la austrialiana Origin Energy), construirá dos presas sobre el río Cuervo para lo que se inundarán 13.000 hectáreas. La instalación generará 640 megavatios que abastecerán al Sistema Interconectado Central, que atiende la mayor demanda de energía en Chile.
La construcción de los embalses, que se ubicarán a 46 kilómetros de la ciudad sureña de Puerto Aysén, supone una inversión inicial de 733 millones de dólares (unos 673 millones de euros). Las obras tendrán una duración estimada de cinco años.