PEKÍN, 6 Ago. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno chino ha reprochado a la nueva ministra de Defensa de Japón, Tomomi Inada, su negativa a reconocer la matanza perpetrada por las tropas imperiales en Nanjing en 1937, denunciando un nuevo intento de "lavar" las "atrocidades" niponas.
"La negativa pública del Ministerio de Defensa japonés está dirigida a lavar las atrocidades de Japón y alterar el orden establecido en la posguerra", han dicho las autoridades chinas, de acuerdo con la agencia oficial de noticias, Xinhua.
El Ministerio de Defensa ha advertido de que "no habrá ningún futuro si Japón sigue negando la historia". Tanto Pekín como Seúl acusan a Tokio no solo de obviar los crímenes cometidos durante la ocupación nipona, sino de rendir tributo a sus autores en el santuario de Yasukuni.
Inada, de tendencia ultraconservadora, sostuvo --nada más asumir el cargo-- que "considerar las acciones de Japón como una invasión o no depende de la perspectiva de cada uno". "No creo que sea apropiado que yo hable sobre eso", dijo.
El Ejército japonés ocupó Nanjing, capital histórica de China, a final de 1937 y en apenas un mes mató a 300.000 personas. Los oficiales nipones Toshiaki Mukai y Tsuyoshi Noda compitieron por ver quién mataba más gente --Mukai decapitó a 106 chinos y Noda a 105--, y ambos fueron condenados y ejecutados por ello a principio de 1948.