PEKÍN, 15 Oct. (DPA/EP) -
El Gobierno de China ha defendido este sábado su estricta política de restricciones para contener la pandemia de COVID-19, la víspera del arranque del Congreso del Partido Comunista Chino, que encumbrará al actual presidente del gigante asiático, Xi Jinping, para un tercer mandato consecutivo.
China aplica una política de 'casos cero', en virtud de la cual adopta fuertes restricciones a la movilidad e incluso confinamientos ante la mínima sospecha de que un brote de coronavirus puede descontrolarse.
Pese a que esta doctrina es ya una excepción a nivel mundial, un portavoz del partido oficial, Sun Yeli, ha afirmado que es precisamente esta vigilancia estricta la que ha permitido mantener bajo control la pandemia y estabilizar las perspectivas económicas.
En este sentido, ha afirmado que China es un país muy poblado y envejecido. "Se han estudiado todas las opciones, y las medidas de respuesta son las mejores en materia de coste-eficacia y han funcionado para nuestro país", ha esgrimido Sun.
Casi 2.300 delegados se reunirán a partir de este domingo para un congreso que se celebra cada cinco años y que concluirá el 22 de octubre. También en esta cita se aplicarán medidas de vigilancia destinadas a evitar que surjan brotes de COVID-19.