PEKIN, 7 Feb. (Reuters/EP) -
El Gobierno sirio está barajando la posibilidad de enviar un emisario a Oriente Próximo para discutir la crisis en Siria, según ha indicado este martes su Ministerio de Exteriores, en un intento por calmar las críticas tras su veto a la resolución respaldada por la Liga Arabe en el Consejo de Seguridad de la ONU.
China, junto con Rusia, bloquearon este fin de semana un borrador de resolución en el que se instaba al presidente sirio, Bashar al Assad, a dimitir. Rusia ha enviado este martes a su ministro de Exteriores, Sergei Lavrov, a Damasco, donde se reunirá con el presidente del país.
El secretario general de la Liga Arabe, Nabil Elaraby, ha denunciado que Rusia y China han perdido su crédito diplomático ante el mundo árabe al vetar la resolución. Sin embargo, el portavoz del Ministerio de Exteriores chino, Liu Weimin, ha querido dejar claro que Pekín quiere mantener su amistad con el mundo árabe y podría enviar a su propio emisario.
"Esperamos que la mediación rusa tenga éxito. China ha estado prestando gran atención al desarrollo de la situación en Siria", ha afirmado Liu. "Estudiaremos enviar a alguien en el futuro próximo a la región, al oeste de Asia y al norte de Africa, para desempeñar un papel proactivo y constructivo para impulsar una solución política a la cuestión siria", ha añadido, sin dar más detalles.
"El pueblo chino es amigo tanto del pueblo sirio como del pueblo árabe. Siempre hemos trabajado juntos y nos hemos coordinado en todo tipo de problemas", ha subrayado el portavoz durante el briefing diario, asegurando que China desarrollará su relación con los países árabes "de acuerdo con los principios chinos".
"Nosotros creemos que los países árabes pueden seguir adelante por la senda que han elegido para ellos y pueden tener paz, estabilidad y desarrollo con ayuda de la comunidad internacional", ha aseverado.