PEKÍN/HANÓI, 3 Nov. (Reuters/EP) -
Los gobiernos de China y Vietnam han alcanzado un acuerdo para manejar su disputa territorial en el mar de China Meridional a través de un proceso de conversaciones, según el Ministerio de Exteriores del gigante asiático.
El anuncio llega meses después de que los ministros de Asuntos Exteriores de China y Vietnam, Wang Yi y Pham Binh Minh, respectivamente, cancelaran en agosto una reunión debido al aumento de la tensión entre ambos países.
Las autoridades de Vietnam criticaron la militarización por parte de China de la zona en disputa, según un comunicado de la Asociación de Naciones del Sureste Asiático (ASEAN).
La tensión ha aumentado en la zona desde junio, cuando Vietnam provocó la indignación de China al llevar a cabo una serie de inspecciones petroleras en una de las islas que Hanói se disputa con Pekín.
Sin embargo, Wang se ha reunido esta semana con altos cargos vietnamitas en Hanói, encuentros que han sido descritos por el asistente del Ministerio de Exteriores chino, Chen Xiaodong, como "francos".
"Alcanzaron un importante consenso. Ambas partes mantendrán el principio de consultas amistosas y diálogo para gestionar y controlar de forma conjunta las disputas marítimas y proteger el marco general de desarrollo de relaciones sino-vietnamitas y la estabilidad en el mar de China Meridional", ha explicado.
Por su parte, el viceprimer ministro de Vietnam, Pham Binh Minh, ha desvelado que propuso en su encuentro con Wang que ambos países resuelvan sus disputas según el sentido común y el Derecho Internacional.
Este último punto puede ser algo más controvertido, ya que Vietnam argumenta que las demandas territoriales de China en la zona no tienen una base legal, como defiende Pekín.
El Gobierno de Vietnam se ha mostrado como uno de los más críticos con la postura de China respecto a la zona, que supone una región de gran tránsito mercantil.
Pekín ha estado construyendo instalaciones y estructuras en las islas artificiales de la zona. Según Estados Unidos, entre otros, estas parecen diseñadas para albergar misiles tierra aire de largo alcance.
Si bien la construcción de instalaciones de hormigón en los arrecifes de Subi, Mischief y Fiery Cross, en las islas Spratly, podría considerarse una escalada militar, Filipinas, que lleva años enfrentado con China por el control de estas aguas, ha asegurado que la construcción de islas artificiales no supone una preocupación.