Imagen del primer buque con ayuda humanitaria para Gaza que zarpó el 12 de marzo desde Chipre. - Europa Press/Contacto/George Christophorou
MADRID, 13 Mar. (EUROPA PRESS) -
Las autoridades de Chipre han anunciado este miércoles que un segundo buque con ayuda humanitaria está preparado para zarpar hacia la Franja de Gaza una vez el barco de la organización no gubernamental Open Arms, que cuenta con 200 toneladas de alimentos a bordo, finalice su misión.
El ministro de Exteriores de Chipre, Constantinos Kombos, ha indicado que este segundo barco tendrá "una capacidad mayor que el primero" y podrá abandonar el puerto de Larnaca cuando el primero descargue su contenido tras atravesar el corredor marítimo establecido. "Si no hay problema, ya tenemos prevista la siguiente salida", ha dicho.
El segundo buque lleva en la ciudad del sureste de Chipre desde el sábado, tal y como ha explicado, si bien no ha especificado con cuánta ayuda cuenta. No obstante, ha aclarado que este segundo envío se realizará con un buque comercial, según informaciones recogidas por el diario 'Phileleftheros'.
Está previsto que la ayuda transportada por la ONG Open Arms llegue el jueves al muelle construido expresamente para sacar adelante la operación. Dicha entrega correrá a cargo de la organización World Central Kitchen. "Debemos garantizar que tenemos la capacidad para distribuir la comida a la población", ha aseverado el ministro.
En este sentido, ha alertado de que uno de los principales peligros es la "gestión de las multitudes" dada la terrible crisis humanitaria a la que se enfrenta la población gazatí, especialmente en el norte del enclave palestino. Según fuentes cercanas al asunto recogidas por la agencia de noticias CNA, el buque de Open Arms avanza por el momento sin imprevistos hacia su destino.
Naciones Unidas y diversas organizaciones no gubernamentales han denunciado las extensas restricciones impuestas por Israel a la entrega de ayuda humanitaria a Gaza, sumida en una gravísima crisis humanitaria a causa de la ofensiva militar --lanzada tras los ataques ejecutados el 7 de octubre por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás)-- que ha hecho saltar las alarmas ante el riesgo de una hambruna a gran escala, especialmente ante el colapso del sistema sanitario gazatí.