WASHINGTON, 22 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Centro Internacional de Arreglo de Diferencias relativas a Inversiones (CIADI) ha condenado al Estado argentino a pagar 320,7 millones de dólares (275 millones de euros) más intereses por la expropiación en 2008 de Aerolíneas Argentinas al español Grupo Marsans. El CIADI es el tribunal internacional del Banco Mundial.
El texto del fallo, al que ha tenido acceso el periódico argentino 'Clarín', establece que "el demandado incumplió el artículo IV del Tratado al no haber entregado a las demandantes un trato justo y equitativo de sus inversiones".
En la página 397 de las 551 que tiene la resolución con fecha de despacho del viernes, 21 de julio, también se hace referencia a "medidas injustificadas al interferir con los derechos de los demandantes respecto de sus inversiones" y de "expropiar ilegalmente las inversiones" en cuestión. Además de Aerolíneas Argentinas y Austral, la expropiación contempló a Aerohanding, Optar y Jet Paq.
El 16 de diciembre de 2008, a las pocas horas de que el Senado sancionara la ley que declaró "sujetas a expropiación" las acciones de Aerolíneas Argentinas y Austral, Marsans presentó una reclamación de indemnización por 1.560 millones de dólares.
Ahora, además de los 320 millones de dólares, el tribunal impuso otros 23,76 millones de dólares más intereses a Argentina en concepto de compensación por los daños causados por la expropiación y 3,5 millones de dólares más para cubrir los costes legales del demandante.
El 9 de enero de 2009, el Gobierno de la entonces presidenta Cristina Fernández de Kirchner publicó el decreto 2347, a través del que designó al Ministerio de Planificación como organismo "expropiante" de Aerolíneas Argentinas y Austral, y creó una Unidad Administrativa que "tendrá a su cargo todas las tareas de manejo de la compañía".
DIFERENCIAS EN LA TASACIÓN
Marsans reclamó 1.100 millones de euros al Gobierno argentino por la expropiación de Aerolíneas Argentinas (AA) ante el tribunal de resolución de conflictos dependiente del Banco Mundial (BM), el CIADI, a raíz de la demanda interpuesta por el grupo en diciembre de 2008, donde la causa sigue abierta y donde ambas partes litigan sobre su valor.
El grupo español presentó su propio informe de tasación, elaborado por Credit Suisse Securities, en el que se valoraba ambas compañías con entre 330 y 536 millones de dólares.
La expropiación de las dos empresas (Aerolíneas Argentinas y Austral), que habían sido privatizadas en 1990, fue aprobada por el Senado argentino por 42 votos a favor y 21 en contra. Mediante esta ley, el Gobierno argentino se hizo cargo de los 9.000 empleados de las dos compañías, que controlan el 80% del mercado doméstico.
NEGOCIACIONES
Entre enero y junio de 2009, la demanda internacional de Marsans fue objeto de una negociación entre el grupo español y el Gobierno argentino. El por entonces ministro de Planificación, Julio De Vido, y exsecretario de Transportes, Ricardo Jaime, se comprometieron a absorber en nombre del Estado parte de un contrato de compra de aviones Airbus que Marsans había suscrito en 2007. Jaime llegó a hablar de "entre 30 y 35 aviones" antes de irse del Gobierno, si bien meses después la cifra bajó a 13 aeronaves.
Marsans se habría comprometido en principio a desistir de la demanda ante el Ciadi y a entregar voluntariamente sus acciones de Interinvest, la compañía controlante del 95% de Aerolíneas y 98% de la empresa Austral. Cuando Jaime fue destituido a raíz de un escándalo judicial, la negociación con Marsans se hundió definitivamente.
Más adelante hubo un encuentro reservado en Madrid entre el sucesor de Jaime, Juan Pablo Schiavi, y el presidente de Aerolíneas, Recalde, con representantes de Marsans, pero en octubre de 2009, Recalde brindó un informe ante la Comisión Bicameral de Seguimiento de las Privatizaciones y dijo que la negociación con Marsans no había prosperado.