MADRID, 25 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) ha destacado este martes que el nuevo alto el fuego de 72 horas acordado por el Ejército de Sudán y las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF) podría ser "un salvavidas" para los civiles atrapados por los combates.
"Damos la bienvenida a los informes de un alto el fuego e instamos a la comunidad internacional a ayudar a encontrar una solución política duradera para poner fin al derramamiento de sangre", ha dicho el director regional del CICR para África, Patrick Youssef.
"Está claro que este alto el fuego debe implementarse en todos los niveles de la cadena de mando y que debe mantenerse para que brinde un verdadero respiro a los civiles que sufren los enfrentamientos", ha agregado.
El organismo ha destacado que la población ha quedado atrapada en sus hogares, incapaz de obtener comida, agua potable y atención médica, y ha denunciado que el uso de armamento explosivo ha tenido un impacto devastador sobre los civiles y la infraestructura.
"Jartum es una ciudad de millones de habitantes densamente poblada. Cuando se utilizan armas explosivas pesadas, las calles se convierten en campos de batalla y los civiles pagan el precio más alto. Cientos han muerto y miles han resultado heridos, un resultado desgarrador de esta violencia", ha sostenido Youssef.
En este sentido, ha hecho hincapié en que "las partes deben adoptar todas las precauciones posibles para evitar heridos y muertos entre los civiles". "La infraestructura civil crítica, como los hospitales y la red eléctrica, deben ser protegidas. No es opcional. Son obligaciones legales", ha zanjado.
Previamente, Naciones Unidas había alertado de que la escasez de alimentos, agua, medicina y combustible es "extremadamente aguda" en la capital de Sudán, Jartum, y sus alrededores a causa de los combates, que estallaron el 15 de abril y que han dejado cientos de muertos y miles de heridos.