MADRID, 14 Jun. (EUROPA PRESS) -
Más de 200 inmigrantes, en su mayoría sudaneses y etíopes, se encuentran en la localidad italiana de Vengimiglia, en la frontera con Francia a la espera que se les permita cruzar hacia este país. Otro grupo de inmigrantes intenta acceder a Austria.
La Policía les ha impedido seguir con su protesta ante el paso fronterizo y, tras días de polémica, las autoridades se han movilizado para levantar campamentos provisionales para acoger a estos inmigrantes. También en Roma el Ayuntamiento y la Cruz Roja han levantado una carpa con capacidad para 150 personas.
"Son personas en tránsito. Es una nueva definición. Según la ley son invisibles, pero desde el punto de vista humanitario no lo son", ha explicado un portavoz de la Cruz Roja, Flavio Ronzi. "Para nosotros son simplemente personas y estamos tratando de responder a sus necesidades", ha argumentado en declaraciones a Euronews.
En la Estación Central de Milán hay otros 400 inmigrantes que llevan días durmiendo en las instalaciones a la espera de poder viajar a Francia o a Alemania.
La prohibición de viajar estaría relacionada con la cumbre del G-7 celebrada la semana pasada en Baviera, Alemania, por lo que está previsto que las restricciones se levanten este mismo lunes.