DACA/SITTWE (BIRMANIA), 16 (Reuters/EP)
Cientos de musulmanes rohingya están huyendo de la represión militar en la frontera de Birmania con Bangladesh para escapar del importante aumento de la violencia en el país, que ya ha matado a más de 130 personas, según el Ejército birmano.
Varios de los musulmanes rohingya han sido abatidos a tiros cuando intentaban cruzar el río Naf que separa Birmania y Bangladesh, mientras otros que iban en barco han sido empujados de vuelta al río por la guardia fronteriza bangladeshí, según han informado residentes en la zona a Reuters.
Esta matanza es la más grave ocurrida en Birmania desde que cientos de personas murieron en enfrentamientos entre comunidades en el estado de Rajine en 2012. Estos ataques han sacado a la luz la falta de supervisión militar del Ejecutivo del premio Nobel de la Paz Aung San Suu Kyi.
Los militares han bloqueado la frontera de Birmania con Bangladesh, donde la mayoría de los residentes son musulmanes rohingya. El Ejército ha intensificado su actividad en los últimos siete días y ha utilizado helicópteros como refuerzos.
Los trabajadores humanitarios, los residentes en los campos de refugiados y las autoridades de Bangladesh estiman que por lo menos 500 musulmanes rohingya han huído de Birmania desde los ataques a tres puestos fronterizos el 9 de octubre, donde murieron nueve policías. Los refugiados se encuentran ahora en los campamentos instalados en el frontera bangladeshí.
"Este martes, 86 musulmanes rohingya, de los cuales 40 eran mujeres y 25 niños, fueron rechazados por los guardias de la frontera de Bangladesh. Ahora hemos reforzado nuestras patrullas y tenemos fuerzas adicionales para garantizar la seguridad en la zona fronteriza", ha asegurado el oficial al mando del sector de Cox*s Bazar, al este de Bangladesh, el teniente coronel Anwarul Azim.
Desde los ataques del 9 de octubre el número de presuntos milicianos muertos llega a 102, aunque las fuerzas de seguridad aseguran que el número de fallecidos es de 32 personas.