MADRID 27 May. (EUROPA PRESS) -
El número de personas que pasan hambre en el mundo ha caído por debajo de los 800 millones, gracias en parte a los avances logrados en 72 países que han logrado reducir a la mitad la proporción de habitantes con subalimentación crónica, uno de los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM).
El informe anual sobre el hambre de la ONU, elaborado por el Fondo de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), el Fondo Internacional de Desarrollo Afrícola (FIDA) y el Programa Mundial de Alimentos (PMA), calcula en 795 el número personas de hambrientas en el plantea, 216 millones menos que los niveles de 1990-1992 a pesar de que desde entonces el nivel de población ha subido en 1.900 millones.
La subalimentación en las regiones en vías de desarrollo ha bajado del 23,3 por ciento hace un cuarto de siglo al actual 12,9 por ciento, según el informe SOFI (por sus siglas en inglés). De los 129 países analizados, 72 han logrado las metas marcadas por los ODM a nivel alimentario, si bien en su conjunto estas regiones no han alcanzado el objetivo por un pequeño margen.
Naciones Unidas ha lamentado que los avances se han visto ralentizados por la crisis económica global, los fenómenos meteorológicos extremos, los desastres naturales, la inestabilidad política y los conflictos civiles. Todo ello ha llevado a que, por ejemplo, 24 países africanos afronten actualmente crisis alimentarias.
El informe advierte también de que las catástrofes a corto plazo se han convertido en crisis prolongadas. En este sentido, ha apuntado que en los países con este tipo de crisis las tasas de hambre son más del triple que en otros lugares.