SRINAGAR (INDIA), 16 (Reuters/EP)
Las fuerzas de seguridad indias han matado este martes a cinco manifestantes y herido a otros diez en enfrentamientos que han estallado después de que una multitud enfurecida por la muerte de un miliciano separatista en Cachemira les arrojaran piedras y desafiaran el toque de queda en vigor, han informado las autoridades.
La parte india de Cachemira ha registrado violentas protestas desde el pasado 8 de julio, cuando las fuerzas de seguridad abatieron a un comandante del grupo islamista Hizbul Muyahidin, con base en Pakistán, que gozaba un amplio apoyo en esta región de mayoría musulmana.
Cachemira también ha registrado un incremento de la violencia en torno al Día de la Independencia en India, que se celebró el lunes, cuando el primer ministro indio, Narendra Modi, dijo que el país no se plegará al terrorismo y acusó a su vecino y archienemigo Pakistán de glorificarlo.
Un alto cargo policial ha indicado que cientos de manifestantes han lanzado piedras contra las fuerzas de seguridad cuando intentaban restablecer el orden en las calles de Budgam, un distrito a 30 kilómetros al sur de Srinagar, la capital de verano del estado.
Las últimas víctimas se producen después de que las fuerzas de seguridad abrieran fuego con fusiles automáticos, un paso más en su anterior uso de perdigones con el fin de incapacitar pero no matar.
Las tropas indias mataron a un total de siete milicianos este lunes en dos incidentes, cinco de los cuales eran milicianos que habían intentado cruzar la frontera y dos más, que habían atacado una comisaría en Srinagar. Un agente falleció en el tiroteo en la comisaría.
Al menos 64 personas han muerto y miles más han resultado heridas en los 39 días de protestas, mientras que escuelas, tiendas, bancos y oficinas permanecen cerrados en buena parte de Cachemira mientras las fuerzas paramilitares patrullan carreteras, zonas residenciales y mezquitas.