AMÁN/BEIRUT, 16 Nov. (Reuters/EP) -
Los civiles sirios de la autoproclamada capital del Estado Islámico, Raqqa, temen que sean los que paguen los atentados que se han producido en París, después de que este domingo el Ejército francés bombardeara diferentes puntos de la ciudad.
"Varios bandos atacaron la ciudad, creando un ambiente de terror entre los ciudadanos, que creen que serán los que paguen el precio por lo que hizo el Estado Islámico", ha declarado un activista que se encuentra en la ciudad.
"Los sonidos de las explosiones sacudieron la ciudad y encendieron el cielo", ha afirmado otro residente de Raqqa a la agencia Reuters. "Los ataques de la coalición son mucho más precisos, pero los ataques aéreos rusos son como los del régimen, indiscriminados", ha comentado.
El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, grupo de observación de la guerra civil en Siria, ha afirmado que los ataques por parte del Ejército francés habían sido precisos y que no habían causado víctimas civiles.
El ministro de Defensa de Francia ha afirmado que en el bombardeo que tuvo lugar el domingo se lanzaron 20 bombas, que impactaron en diferentes lugares de la ciudad y que alcanzaron un área de reclutamiento y de entrenamiento de yihadistas y un depósito de armas. Aunque este bombardeo no ha sido el único.
Raqqa, ha sido objetivo de los bombardeos de Rusia y de la coalición liderada por Estados Unidos, ya que en la ciudad se encuentran algunos órganos de Gobierno del grupo terrorista.