Hillary Clinton ha sido la candidata más votada pese a no ser la nueva presidenta
En la historia de EEUU cuatro presidentes, todos ellos republicanos, llegaron a la Casa Blanca sin haber ganado el voto popular
MADRID, 12 Nov. (EDIZIONES) -
La candidata demócrata, Hillary Clinton, ha sido la más votada en las elecciones presidenciales de Estados Unidos pero pese a ello el nuevo presidente del país será el republicano Donald Trump, debido a que el sistema de elección del país es indirecto.
Para cuando termine el recuento popular en las próximas horas, Clinton habrá sacado más de dos millones de votos de ventaja a Trump, un equivalente a un 1,5 por ciento más, según las estimaciones de The Upshot, la web de estadística política del 'New York Times', en una victoria moral que no hace sino prolongar una "maldición" de la que Clinton se ha convertido en último ejemplo: ningún miembro de un antiguo gabinete de secretarios ha ganado la Presidencia cuando ha comparecido a las elecciones desde Herbert Hoover en 1928.
En realidad, los ciudadanos votaron este martes en sus respectivos estados a sus representantes en el Colegio Electoral. En virtud del censo y la población, cada estado tiene adjudicado un número de delegados que en total suman 538. Para que un candidato sea elegido presidente necesita el respaldo de al menos 270 de estos representantes.
En todos los estados, salvo en Maine y Nebraska donde el reparto es proporcional, el candidato más votado se lleva el total de delegados con que cuenta independientemente de si su ventaja es de solo un voto. Así pues, aunque en esta ocasión Clinton se haya quedado muy cerca de Trump en algunos estados ha sido el republicano el que se ha llevado todos los representantes.
VOTO ELECTORAL EN DETRIMENTO DEL VOTO POPULAR
En realidad, el que un presidente llegue a la Casa Blanca aunque no haya sido el que más votos ha recibido no es algo nuevo. Otros cuatro mandatarios en la historia de Estados Unidos ya pasaron por esta circunstancia.
En 1824 John Quincy Adams fue elegido presidente pese a que no ganó ni el voto popular ni el electoral. El demócrata Andrew Jackson ganó en ambas categorías pero no consiguió la mayoría necesaria en el Colegio Electoral para ser declarado presidente. La decisión pasó entonces a la Cámara de Representantes, que eligió a Adams.
En 1876, el demócrata Samuel Tilden fue el candidato más votado por los ciudadanos, pero perdió la Presidencia al obtener el republicano Rutheford B. Hayes 185 votos en el Colegio Electoral frente a los 184 suyos.
En 1888, el demócrata Grover Cleveland, que buscaba la reelección, ganó el voto popular, pero perdió al obtener menos votos en el Colegio Electoral que su rival republicano Benjamin Harrison.
La última vez que se ha dado esta circunstancia fue en 2000. El demócrata Al Gore obtuvo más votos que su rival pero perdió al obtener menos votos en el Colegio Electoral. El resultado terminó dirimiéndolo el Tribunal Supremo, que dio a George W. Bush la victoria en Florida por tan solo 537 votos y con ello los 25 votos electorales del estado que le daban la mayoría necesaria en el Colegio Electoral. Gore obtuvo el 48,4 por ciento del voto popular, frente al 47,9 de Bush.
PRESIDENTE CON MENOS DEL 50%
Por otra parte, Trump será presidente con menos de la mitad de los votos. Estados Unidos es un país bipartidista, en el que republicanos y demócratas se han alternado en el poder desde que fue elegido Abraham Lincoln en 1860.
Por ello, en general casi todos los presidentes han sido elegidos con más del 50 por ciento de los votos, si bien ha habido algunas ocasiones en que los candidatos secuntarios --los de los llamados partidos terceros o independientes-- han conseguido arrebatar un buen porcentaje de los votos.
El último caso en el que esto ocurrió fue en 1992, cuando el empresario texano Ross Perot, que se presentó como candidato independiente, obtuvo el 18,9 por ciento de los votos, aunque no consiguió delegados en el Colegio Electoral. En dichas elecciones, terminó imponiéndose el candidato demócrata, Bill Clinton, quien con el 43 por ciento del voto venció al presidente saliente, George H. W. Bush.
Hasta la fecha, el presidente que llegó a la Casa Blanca con menos votos fue John Quincy Adams, quien en 1824 solo recibió el 30,9 por ciento de los votos. Cabe destacar, por ejemplo, que además de Clinton, John F. Kennedy tampoco llegó al 50 por ciento de los votos (49,7%), como tampoco lo hizo Richard Nixon (43,4%) ni George W. Bush en su primer mandato (47,9%).
LA "MALDICIÓN"
Herbert Hoover fue el último miembro del Gobierno que ganó la Casa Blanca. Hace ya casi 90 años de ese día. Hoover fue secretario de Comercio, aunque tradicionalmente el trampolín para llegar a la Casa Blanca era otro: la Secretaría de Estado, por encima incluso del cargo de vicepresidente.
Cinco de los primeros ocho presidentes de Estados Unidos ocuparon el cargo de Secretario de Estado y más tarde, en 1856, James Buchanan también siguió estos pasos hacia la Presidencia Desde entonces, ningún otro demócrata que haya estado en el Gobierno ha logrado llegar a la Presidencia.
En el partido republicano, los dos miembros del Gabinete que más cerca han estado de la Presidencia han sido John Connally y Lamar Alexander. Connally -secretario del Tesoro entre 1971 y 1972- se presentó en las primarias de 1980, en las que fue derrotado por Ronald Reagan a pesar de haber logrado una importante recaudación.
Alexander, por su parte, se presentó a las primarias republicanas en 1996, aunque sus credenciales tenían más que ver con su etapa como gobernador de Tennessee. En 2000 también se presentó, pero en ambas ocasiones su carrera no pasó de las primeras votaciones.