DOHA 19 Dic. (Reuters/EP) -
La coalición internacional liderada por Arabia Saudí ha anunciado este lunes que dejará de usar municiones de racimo fabricadas por Reino Unido en Yemen, donde miles de civiles han muerto en los 20 meses del conflicto.
"El Gobierno de Arabia Saudí confirma que ha decidido dejar de usar municiones de racimo BL-755 y ya ha informado al Gobierno de Reino Unido al respecto", ha informado la agencia de noticias saudí SPA.
Esta ha sido la primera confirmación por parte de Arabia Saudí sobre el uso de municiones de racimo. El general de brigada saudí Ahmed al Assiri ha asegurado en la televisión Arabiya TV que "las bombas BL-755 son usadas de manera limitada y no en áreas residenciales". "No lanzamos bombas en las zonas en las que hay civiles", ha añadido.
El ministro de Defensa británico, Michael Fallon, ha confirmado en el Parlamento que la coalición ha lanzado un "número limitado" de estas municiones en Yemen. Reino Unido, firmante de la convención internacional que prohíbe su uso, investiga si la coalición lanzó municiones BL-755 en Yemen después de un informe publicado por Amnistía Internacional en mayo.
Fallon ha destacado que Reino Unido vendió las municiones a Riad en la década de 1980, mucho antes de la convención de 2008. "Aún así, Arabia Saudí ha confirmado que no volverá a usar las municiones de racimo BL-755 y yo le doy la bienvenida a eso", ha asegurado el ministro británico.
Las bombas de racimo, lanzadas desde el aire o disparadas por la artillería, dispersan cientos de pequeñas bombas a lo largo de una amplia zona. A veces, estas bombas no explotan y son difíciles de localizar y retirar, haciendo que muchos civiles mueran incluso después de que acaben los conflictos.
La guerra en Yemen ha matado a más de 10.000 personas y ha provocado una crisis humanitaria que ha dejado al borde de la hambruna a Yemen, el país más pobre de la Península Arábiga. Además, millones de personas han sido desplazadas.