MADRID, 7 Feb. (EUROPA PRESS) -
La coalición internacional contra el grupo terrorista Estado Islámico, liderada por Estados Unidos, ha admitido este miércoles que ha realizado varios ataques contra posiciones de las fuerzas leales al Gobierno sirio como respuesta a un "ataque no provocado" contra oficinas de una alianza rebelde.
En concreto, la coalición ha acusado a fuerzas aliadas del régimen de Bashar al Assad de atacar este miércoles una sede de las Fuerzas Demcoráticas Sirias (FDS) situada a 8 kilómetros de la línea pactada para separar ambos frentes en la zona del río Éufrates. En las instalaciones también había miembros del contingente internacional.
"Para repeler el acto de agresión contra los socios" de la coalición, se llevaron a cabo varios "ataques", según el comunicado difundido por la alianza norteamericana, en el que no se han dado detalles de posibles daños personales o materiales como consecuencia de estas tensiones.
El Gobierno de Al Assad, que ha acusado en otras ocasiones a Estados Unidos de excederse en su apoyo a sus aliados rebeldes, no ha informado en esta ocasión del incidente al que ha aludido la coalición.