MADRID, 25 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Colombia ha informado de que al menos 33 muertes registradas en los primeros cinco meses de 2021 se pueden atribuir al Ejército de Liberación Nacional (ELN), lo que supone un aumento del 43 por ciento con respecto al mismo periodo de 2020, cuando se confirmaron 23 víctimas mortales.
Sin embargo, detalla, el gubernamental Centro de Recursos para el Análisis de Conflictos (Cerac), las cifras de acciones ofensivas y combates directos contra el ELN han caído un 52 por ciento y un 41 por ciento, respectivamente, con respecto a los datos del año anterior durante los primeros cinco meses.
En esta ocasiones se han contabilizado 35 acciones ofensivas y 16 combates con participación directa del ELN, por debajo de los 73 y 27, respectivamente que se registraron el año pasado, detalle el reciente informe de la Cerac.
El norte de los departamentos de Cauca y Arauca, la zona del Catatumbo en Norte de Santander y el sur de Bolivar, son las regiones que concentran el mayor número de episodios violentos protagonizados por el ELN, el 61 por ciento de todos ellos.
Aunque mayo fue el mes menos mortífero en lo que respecta a las consecuencias de los ataques y acciones del ELN, también se tiene constancia de otro tipo de violaciones, como el desplazamiento forzoso de unos 400 habitantes de las comunidades indígenas del departamento de Risaralda por amenazas de la guerrilla.
Durante el mes de mayo, revela el informe, se han identificado diez ofensivas cuya autoría se desconoce. No obstante, la Cerac no descarta que pueda tratarse del ELN, pues tuvieron lugar en territorios en los que tradicionalmente opera la guerrilla. "En estas acciones murieron ocho personas" y "al menos 1.000 personas se desplazaron forzosamente por combates entre grupos no identificados", cuenta.
El organismo oficial enumera una serie de episodios en los que "es probable" que participara la guerrilla, aunque no descarta tampoco que pueda tratarse de alguna de las disidencias de las FARC, como el asesinato de cuatro personas de una misma familia en Cauca, el desplazamiento forzoso de un millar de personas en Nariño, o un ataque mortal contra dos agentes de Policía en Norte de Santander.
En el informe también se ha incluido el reciente atentando con coche bomba en unas instalaciones del Ejército en la ciudad de Cúcuta, en Norte de Santander, en la que salieron heridas más de medio centenar de personas entre militares y civiles.
Hasta el momento, y aunque el Gobierno ha acusado directamente al ELN de estar detrás de este ataque, algo que la guerrilla ha negado, solo han sido relevados de sus cargos dos coroneles y otros seis militares están siendo investigados por negligencia y supuesta participación.