NAIROBI, 29 May. (Reuters/EP) -
Este lunes ha comenzado formalmente la campaña para las elecciones presidenciales en Kenia que se celebrarán el 8 de agosto y ambos candidatos, el presidente Uhuru Kenyatta y el aspirante Raila Odinga, han hecho llamamientos a evitar toda violencia.
Kenyatta ha arrancado la campaña con un acto en Nairobi con un convoy de coches SUV de lujo que han recorrido la ciudad. "Estamos decididos a garantizar que nuestras elecciones se desarrollan pacíficamente. No tenemos intención de insultar, obstruir o maltratar a nuestros oponentes (...). Paz ahora, paz durante y paz tras las elecciones", ha afirmado.
Odinga, veterano líder de la oposición, abrió su campaña el domingo para la que supone su cuarto intento de lograr la Presidencia. "Las campañas van a ser muy pacíficas y al final esperamos que sea una competición justa", argumentaba.
Un enfrentamiento político encendido podría reabrir viejas heridas y reproducir los incidentes violentos ocurridos tras las elecciones de 2007, cuando murieron más de 1.200 personas después de que Odinga convocara protestas contra el resultado de los comicios después de que las autoridades electorales paralizaran el recuento y declararan vencedor a Mwai Kibaki.
En 2013 Odinga volvió a perder, esta vez por un margen muy estrecho y frente a Kenyatta, y recurrió los resultados ante los tribunales. Entonces no convocó protestas y los tribunales confirmaron el resultado.
Kenyatta, de 55 años e hijo del primer presidente de Kenia, se presenta a la reelección con un bagaje de crecimiento económico, construcción de infraestructuras y ampliación de la red eléctrica, además de la construcción de una vía férrea entre Mombasa y Nairobi con inversión china.
El Partido del Jubileo de Kenyatta sostiene que ha reforzado al Poder Judicial, ha reformado las instituciones electorales y ha impulsado la descentralización, pero el Gobierno también se ha visto afectado por escándalos y huelgas de médicos y profesores universitarios y no hay ningún cargo condenado por corrupción a pesar de los indicios.
Odinga, de 72 años, también viene de una familia política potente, ya que su padre fue el primer vicepresidente del país. Su programa promete rebajar la inflación, acabar con la corrupción, reformar el sector público y fortalecer al Gobierno.
Odinga estuvo preso ocho años tras participar en un intento de golpe de Estado en 1982. Autoproclamado como de izquierda, se presentó a las elecciones en 1997, pero perdió. Tras la violencia de 2007 fue primer ministro en virtud de un acuerdo de gobierno por la que fue nombrado primer ministro.
La Super Alianza Nacional (NASA) eligió a Odinga como su candidato el pasado mes de abril. Otros siete candidatos han sido aceptados por las autoridades electorales, pero no parecen tener opciones de victoria.