MADRID, 20 May. (EUROPA PRESS) -
Una comisión griega ha admitido el recurso presentado por un ciudadano sirio que no quería ser devuelto a Turquía al considerar que se trata de un "país inseguro", en contra del criterio que ha venido manifestando en las últimas semanas las principales instituciones de la Unión Europea.
El demandante, que llegó a la isla de Lesbos, vio rechazada su petición de asilo en Grecia, por lo que iba a ser expulsado hacia Turquía en el marco del acuerdo que entró en vigor el pasado mes de febrero. Sin embargo, recurrió ante una comisión que analiza las peticiones rechazadas y que ha terminado dándole la razón.
La resolución obliga a analizar de nuevo su caso, un proceso que aún podría prolongarse durante varios meses, según el periódico griego 'Kathimerini'.
Este caso abre la puerta a que otros migrantes y refugiados puedan beneficiarse del mismo criterio, lo que podría llevar a un punto muerto la aplicación del pacto entre Bruselas y Ankara. La Policía griega, en colaboración con la agencia europea Frontex, ha deportado este viernes a medio centenar de personas.
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