MADRID, 23 Sep. (EUROPA PRESS) -
Un tribunal militar de República Democrática del Congo (RDC) ha condenado a cadena perpetua por crímenes de guerra y contra la humanidad a Chance Mihonya, un desertor del Ejército que creó en 2017 un grupo rebelde que operaba en la provincia de Kivu Sur, en el este del país africano.
Mihonya ha sido igualmente sentenciado a pagar daños y perjuicios por valor de más de 300.000 dólares (cerca de 256.000 euros) a las víctimas de los ataques del grupo, que tenía sus principales bases en el Parque Nacional Kahuzi Biega, tal y como ha recogido la emisora congoleña Radio Okapi.
Así, el tribunal le ha declarado culpable de cargos de secuestro, torturas, violación, reclutamiento de niños soldado y explotación de las reservas minerales de la zona, actos cometidos por un grupo mai-mai que enbezó durante años Mihonya, conocido como 'Chance'.
El militar fue parte de las Alianza de Fuerzas Democráticas para la Liberación del Congo (AFDL) de Laurent Désiré Kabila, enfrentada al dictador Mobutu Sese Seko durante la guerra entre 1996 y 1997, tras lo que se enroló en las nuevas Fuerzas Armadas de RDC, donde ascendió hasta ser nombrado capitán en 2011.
Sin embargo, Mihonya desertó en 2017 para crear un grupo armado mai-mai, milicias nacionalistas congoleñas formadas para defender su territorio tribal frente a los numerosos grupos rebeldes activos desde los noventa en la zona este de RDC. El sospechoso fue detenido en mayo de 2020 en el Parque Nacional Kahuzi Biega.