MADRID, 15 Feb. (EUROPA PRESS) -
El jefe de la Policía de Sittwe, el teniente coronel Win Naung, ha asegurado este martes que el hombre que se cree que impulsó los ataques de la ciudad de Maungdaw que acabaron con la muerte de nueve agentes fronterizos el pasado mes de noviembre en Birmania ha sido condenado a muerte.
Según declaraciones de Naung al diario 'The Irrawady', el presunto responsable de los ataques, identificado por el diario oficial 'Global New Light of Myanmar' únicamente como Uruma, fue detenido el día después del incidente de que una serie de ataques coordinados acabara con nueve policías muertos y otros cuatro heridos.
La Policía ha señalado que Uruma habría confesado haber planeado el ataque durante tres meses, cuyo objetivo era provocar una emboscada contra los guardias para ayudar a los musulmanes locales de Maungdaw.
Junto a Uruma, otras 13 personas están siendo juzgadas por estos ataques, todos ellos varones musulmanes.
Las penas de muerte son escasas en Birmania, donde no se ha ejecutado ninguna desde 1988, a pesar de que más de 800 individuos han sido condenados a la pena capital durante este mismo periodo. No obstante, todas ellas fueron conmutadas por cadenas perpetuas por el expresidente Thein Sein.
Desde este ataque, el Gobierno ha desplegado a sus tropas en el estado de Rajine, donde se concentra la comunidad rohingya, y ha limitado el acceso no sólo de los medios de comunicación sino también de las agencias humanitarias.
Según la información que baraja la ONU, desde este despliegue el Ejército birmano es responsable del "asesinato de bebés, niños, mujeres y ancianos, tiroteos indiscriminados contra civiles a la huida, quema de pueblos enteros, detenciones masivas, violaciones y abusos sexuales sistemáticos y en masa, así como la destrucción deliberada de fuentes de alimentos".
Naciones Unidas ha recabado las declaraciones de más de 200 personas que han conseguido escapar del asedio del Ejército de Birmania. La inmensa mayoría de los entrevistados han sido testigos de algún acto de brutalidad. Más de la mitad de las 101 mujeres consultadas ha declarado haber sido objeto de abusos o violaciones y, en general, todos describen actos de una violencia inusitada.
La rohingya es una de las minorías más perseguidas del mundo. Desde 1978, los rohingya han ido llegando a Bangladesh en varias oleadas, huyendo de la represión en su Birmania natal.
Según el departamento de la Comisaría de Repatriación de Refugiados Rohingya (CRRR), cerca de 250.000 rohingya entraron en Bangladesh en 1978 huyendo de la 'Operación Dragón' llevada a cabo por el Gobierno birmano, una operación cuyo objetivo era evaluar la situación de los habitantes en zonas fronterizas y tomar medidas contra los extranjeros que habían entrado de forma ilegal en el país.
Esta operación acabó con la expulsión y detención masiva de rohingya, a los que no se consideraban ciudadanos. Entre 1991 y 1992 la ola fue similar: otros 250.000 musulmanes entraron a Bangladesh a través de las fronteras de Cox's Bazar y Bandarban, donde el Gobierno levantó 21 campamentos temporales para ellos.