LONDRES, 8 Jun. (Reuters/EP) -
El hombre que apuñaló a un pasajero en el metro de Londres el pasado diciembre, mientras gritaba "esto es por Siria", ha sido condenado este miércoles por intento de asesinato, según ha informado la Policía de Londres.
El condenado, Muhaydin Mire, de 30 años y procedente del este de Londres, golpeó a su víctima, le tiró al suelo, le propinó una patada en la cabeza y luego intentó degollarle, dejándole un corte de doce centímetros que requirió más de cinco horas de cirugía.
El ataque, que tuvo lugar en la estación de metro londinense de Leytonstone, a las afueras de la ciudad, fue descrita en un principio por la Policía como un "ataque terrorista", por lo que está siendo investigada por el Mando de la Policía Metropolitana contra el Terrorismo.
"A pesar de que Mire no ha sido acusado de ningún delito relacionado con el terrorismo, lo que dijo en el momento del incidente --"esto va por Siria"-- y el contenido que tenía descargado en su teléfono móvil implican que pudo estar inspirado por alguna ideología extremista", ha declarado el comandante Dean Haydon.
Mire, que también trató de agredir a varias personas durante su ataque, se había declarado culpable de cuatro intentos de agresión, pero negó que intentara asesinar a sus víctimas. Un jurado le ha declarado culpable de intento de asesinato, y será sentenciado en julio.
Varias personas grabaron fragmentos del incidente con sus teléfonos móviles, lo que según han declarado las autoridades policiales, ha servido de gran ayuda en la investigación. Parte de las imágenes filmadas fueron publicadas en Internet, convirtiéndose en virales, sobre todo aquellas que mostraban a un transeúnte gritando a Mire: "Tú no eres musulmán, hermano". La frase ha sido incluso aplaudida por el primer ministro británico, David Cameron.
Después de apuñalar a su primera víctima en el cuello, un hombre de unos 56 años, Mire salió de la estación de Leytonstone, para después volver a entrar, apuntando a la gente con su cuchillo. Incluso llegó a perseguir a uno de los viandantes que le grababa con su teléfono.
La Policía declaró que un doctor presente en la escena del delito corrió a ayudar a la víctima, que se encontraba desangrándose en el suelo, mientras el resto de los allí presentes hablaban a Mire para atraer su atención y restringir sus movimientos al rodearle mientras llegaba la Policía. Las autoridades acudieron en menos de diez minutos y acabaron utilizando una táser para desarmarle.
"Fue la reacción de londinenses respondiendo de forma calmada y sensata a un individuo muy peligroso, y todos deberían ser aplaudidos por ello", ha dicho Haydon.
El incidente en Leytonstone tuvo lugar en diciembre del año pasado, en medio de una gran tensión en Europa tras los ataques de París del Estado Islámico en noviembre.