MADRID 24 Oct. (EUROPA PRESS) -
Una veintena de congresistas republicanos ha irrumpido este miércoles en una vista a puerta cerrada de la Comisión de Inteligencia de la Cámara de Representantes donde estaba previsto que declarara la subsecretaria adjunta del Pentágono en el marco de la investigación sobre la posible apertura de un proceso de destitución ('impeachment') contra el presidente estadounidense, Donald Trump.
Los congresistas, liderados por el republicano Matt Gaetz, de Florida, interrumpieron las declaraciones de Laura Cooper --encargada de supervisar los asuntos de Ucrania y Rusia en el Departamento de Defensa-- durante cinco horas, según ha informado la cadena de televisión CNN, que relata que los diputados entraron gritando.
En este sentido, han exigido que se les permita ser testigos de los procedimientos utilizados por la comisión a puerta cerrada. La escena, que ha resultado caótica, ha representado una nueva confrontación entre republicanos y demócratas en la Cámara, donde el partido de Trump ha vuelto a cargar contra el presidente de la comisión, Adam Schiff, y la investigación contra el dirigente.
Los republicanos no abandonaron la sala hasta las 2.00 de la tarde (hora local), por lo que la declaración comenzó a las 3.00, con un retraso de casi cinco horas. Varios testigos han relatado que Cooper se encontraba ya sentada y lista para testificar cuando los republicanos irrumpieron en la sala por tres puertas diferentes.
El representante Bradley Byrne, de Alabama, comenzó a gritar a Schiff, que no "entró al trapo". Otros demócratas, entre ellos Val Demings, sí profirieron gritos contra Byrne y otros republicanos. Demings preguntó a los republicanos si pretendían enseñar a sus hijos que "está bien mentir, robar y engañar siempre y cuando no te pillen".
"¿No tenéis trabajo que hacer hoy?", ha manifestado la congresista a otro miembro del Partido Republicano mientras Cooper abandonaba la sala. "Es lo más cercano a una rebelión que he visto aquí como miembro del Congreso", ha aseverado otro testigo.
Trump, por su parte, ha restado importancia al inicio de los preliminares para un juicio político en su contra en el Congreso y ha subrayado que la oposición demócrata se ha entregado a esta vía porque "es la única forma de vencerme".
EL 'IMPEACHMENT' Y LA GOTA QUE COLMÓ EL VASO
El Congreso investiga un posible abuso de poder por parte de Trump por su conversación telefónica del pasado 25 de julio con el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, en la que pide al dirigente que haga lo posible para que la Fiscalía investigue a Biden y su hijo, Hunter.
El hijo de Biden, por su parte, ha defendido el trabajo que realizó como consejero de la empresa gasística ucraniana Burisma, aunque ha lamentado que no fuera capaz de prever que sus cargos en empresas extranjeras podrían tener una repercusión negativa en la carrera política de su progenitor.
Abogado de profesión, Hunter Biden ha dicho que no lamenta su trabajo para empresas extranjeras pero sí los ataques que ha acabado recibiendo su padre.
El presidente de Estados Unidos ha acusado en varias ocasiones a Hunter Biden de estar implicado en temas de corrupción por su etapa de consejero en la empresa gasística ucraniana y ha extendido su acusación a Joe Biden, de quien dice que se encargó de impedir investigaciones judiciales sobre la gestión empresarial de su hijo en Ucrania.