BOGOTÁ, 8 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Congreso ha enviado este lunes a la Corte Constitucional el proyecto de ley para celebrar un plebiscito para ratificar el eventual acuerdo de paz firmado por el Gobierno y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), a pesar de la oposición de la guerrilla a este mecanismo.
El alto tribunal tendrá que examinar si se produjeron irregularidades en el proceso de discusión parlamentaria en el que se aprobaron los puntos clave del borrador, según informa el diario colombiano 'El Espectador'.
La respuesta de las FARC no se ha hecho esperar. "No aceptamos la aplicación del llamado 'plebiscito para refrendación del acuerdo final para la terminación del conflicto y la construcción de una paz estable y duradera'", han dicho en "una carta abierta al Gobierno".
La guerrilla ha esgrimido que se trata, por una parte, de "una pretensión extra agenda que lesiona el acuerdo general" de las negociaciones de paz, "toda vez que de su punto sexto se desprende que son las partes los competentes para definir el sistema de refrendación".
Por otro lado, ha considerado que el plebiscito "no es el instrumento jurídico adecuado para lograr la refrendación del acuerdo final" porque, de acuerdo con la Constitución, "es el pronunciamiento del pueblo mediante el cual se apoya o rechaza una decisión del Ejecutivo".
"La paz es un derecho y un deber de obligatorio cumplimiento que en este caso ha sido posible gracias a este proceso bilateral de conversaciones entre las FARC y el Estado colombiano, no por una decisión individual o dadivosa de una persona", ha recalcado la insurgencia.
Las FARC han añadido que "la propuesta que hace el Gobierno entraña un serio déficit democrático al fijar un menguado umbral del 13 por ciento del censo electoral para crear un engañoso mandato: el de trasladar todo lo acordado y lo que resta por acordarse en la mesa de negociaciones de La Habana".
"De tal manera, que la iniciativa puesta en marcha inconsultamente, no solo desatiende la palabra empeñada en la agenda, sino que constituye una aplicación de instituciones constitucionales y legales fuera de lugar, so pretexto de darle al plebiscito condiciones y alcances de los que carece por naturaleza", ha esgrimido.
Así las cosas, las FARC han llamado a superar este "error político jurídico" para, "de manera bilateral y reposada, continuar el desarrollo de los puntos de la agenda de paz que aún quedan por resolver, entre ellos el de la implementación, verificación y refrendación".
"Dejemos de lado lo que no haya surgido de los textos del acuerdo general y busquemos conjuntamente vías jurídicas que permitan la inmediata implementación de todo lo acordado en La Habana una vez se firme el acuerdo final. Manos a la obra. El país lo agradecerá", han instado.