MADRID, 3 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Consejo Constitucional de Argelia ha confirmado este miércoles la "vacancia definitiva" en la Presidencia del país, un día después de que el presidente, Abdelaziz Buteflika, anunciara su dimisión cerca de tres semanas antes del fin de su mandato.
"Vista la carta de dimisión del presidente de la República, Abdelaziz Buteflika, con fecha 2 de abril de 2019 (...) y según la Constitución, especialmente el artículo 102 (...) constate la vacancia definitiva de la Presidencia", ha dicho el organismo en su comunicado.
Asimismo, ha resaltado que la declaratoria de vacancia definitiva es vigente desde este mismo miércoles y ha adelantado que la declaración será publicada en el Diario Oficial, según ha recogido la agencia estatal argelina de noticias, APS.
La reunión ha estado encabezada por el presidente del Consejo Constitucional, Tayeb Belaiz, y se ha centrado en la aplicación del citado artículo 102 de la Constitución de Argelia, el que fija el procedimiento para la renuncia o el cese de un presidente por motivos de salud.
Dicho artículo de la Carta Magna argelina señala que, en caso de dimisión o fallecimiento del jefe del Estado, el Consejo Constitucional "se reúne de pleno derecho" para constatar la "vacante definitiva" en la Presidencia de la republica. Al organismo constitucional le corresponde comunicar de manera inmediata al Parlamento que el cargo de presidente ha quedado vacante.
El mismo artículo de la Constitución argelina establece que, en caso de vacante en el cargo de presidente, asumirá la jefatura del Estado de manera provisional el presidente del Senado argelino (Consejo de la Nación), Abdelkader Bensalá, por un periodo máximo de 90 días, en el que deberá convocar elecciones presidenciales sin que él pueda presentarse como candidato.
Buteflika notificó oficialmente este martes al presidente del Consejo Constitucional su decisión de renunciar al cargo tras la presión de las manifestaciones que se suceden desde finales de febrero, cuando el régimen anunció que se presentaría a las presidenciales para optar a un quinto mandato.
Aunque el mandatario retiró su candidatura, optó por aplazar las elecciones para permitir la celebración de una conferencia nacional con la que sentar las bases de una "nueva Argelia", las protestas han continuando, exigiendo su salida inmediata del poder.
"Tengo el honor de notificarle formalmente mi decisión de poner fin al mandato que cumplía en calidad de presidente de la República a partir de este día, 2 de abril de 2019", reza la carta que Buteflika envió el martes a Belaiz.
"Esta decisión, que tomo de corazón y en conciencia, está destinada a contribuir al apaciguamiento de los corazones y las mentes de mis compatriotas para permitirles proyectar Argelia juntos hacia el futuro mejor al que aspiran legítimamente", sostuvo.
"Esta decisión procede del deseo de evitar que los excesos verbales que marcan por desgracia la actualidad degeneren en deslices potencialmente peligrosos para la protección de las personas y los bienes, lo que es una de las prerrogativas esenciales del Estado", añadió.
Asimismo, aseguró que había actuado "de forma incansable para consolidar las bases de la unidad nacional, la independencia y el desarrollo del país, así como para promover la reconciliación con nosotros mismos, nuestra identidad y nuestra historia". "Le deseo todo lo mejor al pueblo argelino", remachó.
LAS PRESIONES DEL EJÉRCITO
La carta de Buteflika fue publicada alrededor de una hora después de que el jefe del Ejército, Gaid Salá, reclamara la aplicación "inmediata" del artículo 102 argumentando que que "no hay tiempo que perder" a la hora de inhabilitar al presidente para "garantizar la gestión de los asuntos del Estado en el marco de la legitimidad constitucional".
Asimismo, afirmó que el comunicado publicado el lunes por la Presidencia anunciando que Buteflika dimitirá "antes del 28 de abril" emana "de entidades no constitucionales y no habilitadas".
"En este contexto particular, confirmamos que toda decisión adoptada fuera del marco constitucional es considerada como nula", recalcó, al tiempo que reiteró que "el pueblo argelino espera con impaciencia que se satisfagan sus reivindicaciones legítimas".
De esta forma, Salá criticó "la tergiversación y la astucia de ciertos individuos que trabajan para perpetuar la crisis y hacerla más compleja, con la única preocupación de preservar sus estrechos intereses personales y mostrando poco respeto por los intereses de las personas y el futuro del país".
"Es momento de que el pueblo recupere sus derechos constitucionales legítimos y su soberanía plena", había subrayado el jefe del Ejército, antes de apuntar que las Fuerzas Armadas buscan "encontrar una solución a la crisis que emane exclusiva y estrictamente de su lealtad a la patria".
El histórico mandatario ha ido perdiendo apoyos en las últimas semanas, desde los partidos de la coalición gubernamental --incluido el suyo, el Frente de Liberación Nacional (FLN)-- hasta personas de su círculo más íntimo, entre ellos el propio Salá.
El presidente, que sufrió un infarto cerebral en 2013 y quedó inhabilitado, se impuso pese a ello en las elecciones celebradas en 2014. Desde entonces, se ha estado dirigiendo al público en una serie de cartas para anunciar sus decisiones.