MADRID, 28 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas ha firmado una resolución condenando la prohibición de trabajar a las mujeres promovida por los talibán en Afganistán, medida que en los últimos meses ha provocado que incluso las trabajadoras de la ONU hayan tenido que interrumpir sus labores.
La resolución, aprobada de forma unánime, pide la "participación plena, igualitaria, significativa y segura de las mujeres y las niñas en Afganistán", y exige a los talibán "que reviertan rápidamente sus políticas y prácticas que restringen el disfrute de los derechos humanos y las libertades fundamentales de las mujeres y las niñas, incluidos los relacionados con su acceso a la educación, el empleo, la libertad de circulación y la participación en la vida pública".
Además, en el texto se exige garantizar el acceso humanitario a los trabajadores de la ONU y de otras organizaciones de ayuda humanitaria, sin importar su género, para poder atender a las miles de personas que necesitan asistencia, tanto alimentaria como médica o educativa.
También han reiterado el apoyo pleno a la Misión de Asistencia de las Naciones Unidas en Afganistán (UNAMA), cuyos trabajadores actúan ahora mismo desde sus domicilios --tanto hombres como mujeres-- por motivos de seguridad, disminuyendo de forma crítica la asistencia que la organización puede proporcionar a los afganos.
Las autoridades instauradas por los talibán, tras hacerse con el poder en agosto de 2021, han hecho frente a críticas por sus restricciones de las libertades civiles, incluido el cierre de centros educativos y la exclusión de las alumnas de los mismos, en medio de una batería de medidas discriminatorias contra las mujeres que las alejan de sus puestos de trabajo y rigen aspectos de su vida diaria.
El Ministerio de Economía de la autoridad talibán de Afganistán emitió en diciembre un decreto en el que ordenaba a todas las ONG, ya sean nacionales o internacionales, la suspensión de los contratos de trabajo de las mujeres hasta nuevo aviso.
Tras una serie de protestas, así como de advertencias de varias organizaciones de paralizar la ayuda humanitaria, el portavoz de dicha cartera, Abdul Rahman Habib, afirmó en enero que las mujeres podrían trabajar en las ONG que quisieran. Sin embargo, desde abril han revertido este permiso, y no permiten ejercer tampoco a las trabajadoras humanitarias.