NUEVA YORK, 10 Jul. (Reuters/EP) -
El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas está sopesando reclamar al secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, y a la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPCW) crear un equipo de investigación para determinar responsabilidades en los ataques químicos en Siria.
Estados Unidos ha circulado este jueves un proyecto de resolución al organismo, según fuentes diplomáticas, tras más de dos meses de conversaciones con Rusia sobre cómo determinar la responsabilidad de estos ataques.
El borrador, al que ha tenido acceso la agencia británica de noticias Reuters, reclama a Ban que, junto con la OPCW, autorice recomendaciones sobre la creación de un mecanismo de investigación conjunto ONU-OPCW.
Este mecanismo "identificaría dentro de lo posible qué individuos, entidades, grupos o gobiernos fueron los responsables, organizadores, patrocinadores o partes involucradas de cualquier otra forma en el uso de armas químicas en Siria".
Una vez que el equipo de investigación iniciara sus trabajos, Ban tendría que informar una vez al mes de los progresos al Consejo de Seguridad de la ONU. El organismo tendría que finalizar su primer informe en 90 días.
Sira aceptó destruir sus armas químicas en 2013, si bien la OPCW ha determinado que desde entonces el gas cloro ha sido utilizado "de forma reiterada y sistemática" como un arma. La OPCW no tiene mandato para acusar a los responsables, y tanto el Gobierno como la oposición han negado su responsabilidad.
El cloro no está prohibido, pero su uso como un arma está vetado por la Convención de Armas Químicas de 1997, a la que Siria se unió en 2013.
"Dadas las numerosas acusaciones de ataques con cloro en Siria y la ausencia de un organismo internacional que identifique a los responsables, es fundamental que el Consejo de Seguridad de la ONU alcance un consenso para establecer este organismo independiente de investigación", ha valorado la embajadora estadounidense ante la ONU, Samantha Power.
El determinar responsabilidad en los ataques allanaría el camino al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, que ya ha amenazado con las posibles consecuencias, para tomar medidas contra los responsables.