El expresidente acusa al Gobierno de Luis Arce de utilizar a la Justicia para "eliminar adversarios"
MADRID 14 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Tribunal Constitucional de Bolivia ha emitido este jueves una sentencia en virtud de la que desautoriza al expresidente Evo Morales como líder del gubernamental Movimiento Al Socialismo (MAS) y reconoce a Grover García, afín al actual mandatario Luis Arce, como presidente de la formación.
El cisma en el MAS se originó cuando Morales celebró un congreso en la localidad de Lauca Ñ, en el departamento de Cochabamba, en el que salió como máxima autoridad del partido. Sin embargo, este foro se celebró en paralelo al congreso oficial del MAS, celebrado en El Alto, a las afueras de La Paz, y donde García surgió como el elegido para suceder a Arce.
Tras esto, el Tribunal Supremo Electoral de Bolivia (TSE) decidió no reconocer la nueva directiva del MAS liderada por Morales, si bien una jueza decidió revocar esta decisión en mayo, legitimando al expresidente como máxima autoridad del partido. Ahora el Constitucional ha revocado esta decisión de la magistrada, desautorizando de nuevo a Morales.
EL EXPRESIDENTE DENUNCIA 'LAWFARE'
Morales ha expresado su enfado por esta sentencia que ha calificado de "inconstitucional, ilegal e ilegítima" y de la que ha responsabilizado al Ejecutivo boliviano. En un mensaje publicado en su cuenta de la red social X, ha acusado al Gobierno de "dar un golpe a la revolución y el proceso de cambio, presionando a la Sala Constitucional IV para que ésta le entregue la sigla del MAS-IPSP".
"¿Cómo una sentencia judicial puede terminar dirimiendo algo que corresponde a la decisión democrática de los militantes del partido?", se ha preguntado el exmandatario, denunciando por ello el "deterioro de la democracia en Bolivia".
Morales considera que el Gabinete de Luis Arce "ya no necesita a los otros poderes del Estado", sino que le basta con el Tribunal Constitucional para "eliminar adversarios, poner autoridades, apropiarse de estructuras políticas, suspender procesos electorales, ayudar a sus socios anulando sentencias penales y hasta entregándoles tierras del Estado".
El expresidente Morales parece no haber digerido aún su salida abrupta del país en medio de las acusaciones de fraude electoral en las elecciones de 2019 y desde su vuelta ha estado criticando al presidente Arce por lo que considera una mala gestión de su legado. Mientras, éste alerta de que están queriendo sacarle del poder.
Todo explotó tras celebrarse en octubre de 2023 un congreso del MAS que dejó al partido en una situación de bicefalia que los seguidores de Morales intentaron romper expulsando a Arce. Sin embargo, el Tribunal Superior Electoral anuló aquel encuentro celebrado en Lauca Ñ ahondando en el malestar de los 'evistas'.
En vísperas de una gran marcha convocada por Morales, que fue seguida después por una serie de bloqueos que durante casi un mes colapsaron las carreteras que unían el sur y este del país con Cochambamba --bastión político del expresidente--, Arce tuvo que hacer frente a un intento de golpe de Estado, que apenas duró unas horas.