MADRID, 16 May. (EUROPA PRESS) -
El Tribunal Constitucional de Sudáfrica ha celebrado este lunes una vista para decidir si la moción de censura contra el presidente, Jacob Zuma, podrá ser votada en secreto, tras lo que el jefe del sistema judicial, Mogoeng Mogoeng, ha dicho que necesitará más tiempo antes de pronunciarse.
Los abogados de la oposición han defendido que la votación secreta es necesaria para permitir que los parlamentarios voten con libertad, mientras que los abogados del Gobierno han recalcado que el tipo de votación no cambiará el resultado de la moción.
"Existe la conjetura de que votar en línea con el partido es contrario a votar en conciencia", ha lamentado uno de los abogados del Gobierno, según ha informado el diario sudafricano 'News24'.
El caso fue llevado por la oposición ante el Tribunal Constitucional después de que la presidenta del Parlamento, Baleka Mbete, rechazara que la votación se celebrara en secreto.
El Parlamento rechazó la petición, argumentando que la votación secreta no está contemplada ni por la Constitución ni por la reglamentación interna del organismo.
El Parlamento, con mayoría del Congreso Nacional Africano (ANC), rechazó en abril de 2016 una moción de censura contra el presidente después de que el Tribunal Constitucional informara de que el presidente había incumplido la ley al ignorar una orden de devolver fondos estatales que había gastado en su vivienda particular.
Zuma se ha enfrentado a numerosos escándalos a lo largo de su legislatura de siete años de duración y recientemente ha sobrevivido a una moción de censura en el Parlamento después de que el Tribunal Constitucional le acusara de haber violado la Constitución.
En los últimos meses han aumentado las peticiones a Zuma para que dimita, y el mandatario tuvo incluso que abandonar un acto con motivo del Día Internacional de los Trabajadores tras ser abucheado por muchos de los presentes, que reclamaron su dimisión.
Seguidores y opositores de Zuma terminaron por protagonizar enfrentamientos de escasa consideración durante el acto, celebrado en la localidad de Bloemfontein, provocando la cancelación del mismo y la retirada del presidente, quien fue escoltado.
Las protestas estuvieron encabezadas por miembros del Congreso de Sindicatos Sudafricanos (COSATU) --que forma parte de la alianza gubernamental--, organismo que reclamó recientemente la dimisión del presidente.
Al llamamiento del COSATU se unió posteriormente el Partido Comunista Sudafricano (SACP), que integra junto al propio sindicato y el ANC la conocida como Alianza Tripartita.
A estos llamamientos se han sumado en las últimas semanas los veteranos del ANC --que incluye a activistas que lucharon contra el Apartheid, ministros y comisarios--, quienes han pedido al partido que "haga lo correcto y pida el cese del presidente".