El presidente de Confindustria dice que el país ha entrado en "economía de guerra"
ROMA, 23 Mar. (EUROPA PRESS) -
El primer ministro italiano, Giuseppe Conte, confía en que "en los próximos días" puedan comenzar a verse los efectos de las medidas adoptadas hasta ahora por el Gobierno para contener la pandemia de coronavirus, al tiempo que subraya que es prioritario contener su propagación hacia el sur del país.
En una entrevista concedida este lunes al diario 'La Stampa', Conte ha reconocido que se avecinan "los días más difíciles porque no hemos alcanzado la fase más aguda del contagio y las cifras seguirán aumentando". "Estamos a la espera en los próximos días de los efectos de las medidas adoptadas", ha añadido.
El primer ministro ha insistido en que los efectos de las medidas de confinamiento y de otro tipo adoptadas por su Gobierno para frenar la propagación no podían verse "de forma inmediata". Para lograrlo, "hace falta el esfuerzo de todos (porque) está en juego el tejido social y económico del país", ha insistido.
En este sentido, como ha venido repitiendo desde que comenzó el brote en Italia, ha insistido en que "la batalla contra el coronavirus se combate permaneciendo unidos". Ahora que se ha procedido al cierre de todas las actividades productivas no esenciales, "si todos respetamos las prohibiciones, si todos cumplimos con nuestra parte, saldremos antes de esta prueba dificilísima".
El Gobierno italiano, ha agregado, está adoptando todas las medidas que "considera necesarias para contener la epidemia en el centro y evitar que estalle en el sur", dado que el norte es la zona más afectada, con las regiones de Lombardía, Emilia Romaña y Véneto como las más castigadas.
Todo el Ejecutivo, en colaboración con las autoridades regionales, está trabajando "incluso de noche para evitar este escenario", ha asegurado, invitando a "los italianos a que se queden en casa, tanto en el norte como en el sur". "No hay otra alternativa", ha recalcado, reconociendo que el país se enfrenta "a la crisis más difícil desde la postguerra".
Según el último balance dado a conocer el domingo, en Italia se han contabilizado ya más de 59.000 casos de Covid-19, de los que 5.476 han terminado en muerte. Por otra parte, más de 7.000 pacientes han conseguido superar la enfermedad hasta la fecha.
EL PAÍS ENTRA EN ECONOMÍA DE GUERRA
Por su parte, Vincenzo Boccia, el presidente de Confindustria, la principal patronal de la industria italiana, ha destacado que con el último decreto aprobado el domingo por el Gobierno "de la emergencia económica entramos en la economía de guerra". "El 70 por ciento del tejido productivo cerrará", ha subrayado, según informa la agencia Adnkronos.
Boccia ha subrayado la necesidad de preocuparse ya de cómo hacer para "evitar que muchas fábricas, si no todas, puede que no vuelvan a abrir sus puertas en unas semanas por crisis de liquidez". "¿Cuántos días o meses puede sobrevivir una empresa que factura cero?", ha planteado. Según sus estimaciones, solo entre el 20 y el 30 por ciento de las empresas siguen abiertas
El presidente de Confindustria ha defendido la necesidad de "vencer la batalla contra el virus" pero al mismo tiempo pensar "en la defensa de la economía". En este sentido, ha explicado que desde su patronal han propuesto al Gobierno "ampliar el fondo de garantía para que pueda haber liquidez en corto para las empresas para superar esta fase de transición".
"Saldremos todos con una deuda pero que podrá pagarse en 30 años como una deuda de guerra. Debemos intervenir para hacer que, cuando todo haya terminado, las empresas reabran y todo, de forma gradual, vuelva a la normalidad", ha subrayado Boccia.