SEÚL, 24 Ago. (Reuters/EP) -
El régimen de Corea del Norte ha difundido imágenes de su líder, Kim Jong Un, junto a planos de un cohete que, de llegar a término, se convertiría en un misil balístico intercontinental (ICBM) más potente que cualquiera de los proyectiles que ha probado en los últimos meses.
Los medios oficiales difundieron las imágenes a última hora del miércoles y, en ellas, Kim aparece en la Academia de Ciencias de Defensa junto a un diagrama de un cohete de tres etapas llamado 'Hwasong-13' y con mayor capacidad que el 'Hwasong-14', probado en julio en dos ocasiones.
Expertos armamentísticos han asegurado que se trata de una tecnología inédita para el régimen norcoreano, con capacidad para alcanzar la zona continental de Estados Unidos y llegar incluso a la costa este. Sin embargo, no hay muestras de que el país asiático cuente ya con dicha tecnología.
"Deberíamos observar el 'Hwasong-13' como un ICBM (con alcance) de 12.000 kilómetros", según una experta del Instituto para Estudios del Extremo Oriente de la Universidad de Kyungnam, Kim Dong Yub. Una distancia de 11.000 kilómetros bastaría para llegar a ciudades como Washington y Nueva York.
El general retirado Moon Sung Muk, que representó a Corea del Sur en las conversaciones militare con el Norte, ha explicado que los planos demuestran que "están trabajando en un diseño de tres etapas con un mayor empuje y alcance". Tras probar el 'Hwasong-14', con un radio de alcance de entre 9.000 y 10.000 kilómetros, el nuevo misil "puede ir más lejos". "Es el mensaje", ha añadido.
El responsable de 'Nonproliferation Review', Joshua Pollack, también ha coincidido en que Pyonyang tiene una clara estrategia al difundir las fotografías que ahora se han analizado con lupa: "Vamos a echar un vistazo para alentar la producción nacional de misiles y anunciar qué viene ahora".
No en vano, las imágenes han visto la luz en plenas tensiones entre Corea del Norte y Estados Unidos, a pesar de que las dos partes han relajado su retórica en los últimos días tras amenazarse con atacarse militarmente. Para Moon, el régimen norcoreano aún intenta demostrar que "es quien controla el campo de batalla".