GINEBRA, 13 Dic. (Reuters/EP) -
El régimen de Corea del Norte ha rechazado este martes un informe del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos que denuncia los casos de secuestros de ciudadanos extranjeros en Pyongyang y las separaciones forzosas de numerosas familias desde la guerra.
"No tiene sentido. No hacemos ese tipo de secuestros", ha afirmado el embajador norcoreano ante las oficinas de la ONU en Ginebra, So Se Pyong. El informe, ha añadido, "no es justo ni imparcial", sino que va dirigido contra las autoridades del país asiático.
El Alto Comisionado aseguró la semana pasada que los raptos de extanjeros --especialmente de surcoreanos y japoneses-- eran "una práctica bien documentada" en Corea del Norte. Asimismo, recogió que, desde la guerra que concluyó en 1953, casi 130.000 personas han pedido reunirse con sus familiares en Corea del Norte, pero más de la mitad han muerto sin lograrlo.
So ha argumentado que las reuniones han sido suspendidas por las maniobras militares conjuntas de Corea del Sur y Estados Unidos. "Si la situación es la correcta y toda la tensión se calma, ocurrirá. Siempre estamos abiertos a ellas", ha agregado.
El embajador norcoreano también ha apelado al "deber" de Seúl de entregar a 13 trabajadores de un restaurante en China que desertaron el año pasado. Según Pyongyang, fueron "secuestrados", por lo que ha instado a Naciones Unidas a reclamar su liberación.