MADRID, 6 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Corea del Sur ha condenado este miércoles la prueba llevada a cabo por Corea del Norte con una bomba de hidrógeno, recalcando que se trata de una violación de las resoluciones del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.
"La provocación de Corea del Norte es una clara violación de las resoluciones del Consejo de Seguridad y un grave desafío a la paz y la seguridad internacional", ha dicho el viceministro de Exteriores surcoreano, Lim Sung Nam.
Seúl ha afirmado además que cooperará con los países de la región para "hacer pagar el precio" a Pyongyang por su prueba, al tiempo que ha anunciado un incremento de la vigilancia en la frontera por parte del Ejército, según ha informado la agencia surcoreana de noticias Yonhap.
El Gobierno de Corea del Norte ha asegurado este miércoles haber llevado a cabo una prueba con una bomba de hidrógeno miniaturizada, apenas unas horas después de que se registrara un terremoto de magnitud 5,1 en el norte del país, tal y como ha indicado la agencia estatal norcoreana de noticias, KCNA.
En su comunicado, el Gobierno ha recalcado que la prueba ha sido "exitosa", al tiempo que ha asegurado que se ha llevado "de forma segura y perfecta, sin provocar un impacto negativo en el medioambiente".
Inmediatamente después del seísmo, la Agencia Meteorológica de Corea del Sur apuntó que el mismo podría haber tenido un origen artificial, algo que no descartó Japón, que dijo que podría haberse tratado de una explosión.
El Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS) ha detallado que el epicentro se ha situado a unos 19 kilómetros de la ciudad de Sungjibaegam y a 376 kilómetros de la capital, Pyongyang. Por el momento no hay informaciones sobre víctimas o daños materiales.
ANUNCIO DE KIM JONG UN
El líder norcoreano, Kim Jong Un, afirmó a principios de diciembre que el país había desarrollado bombas de hidrógeno además de armas nucleares. "Corea del Norte se ha convertido en un país con armas nucleares capaz de detonar bombas nucleares y de hidrógeno para defender la soberanía y la dignidad de la nación", dijo.
Así, destacó que si el país continúa este camino, "se convertirá en un país poderoso al que ningún enemigo se atreverá a provocar", al tiempo que ensalzó los esfuerzos realizados por sus predecesores en el cargo, Kim Il Sung y Kim Jong Il --su abuelo y padre, respectivamente--.
Corea del Norte está sometida a fuertes sanciones internacionales aprobadas por el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas por sus ensayos nucleares y balísticos. Las conversaciones a seis bandas sobre el programa nuclear de Corea del Norte están paralizadas desde 2008, cuando las autoridades de Pyongyang decidieron abandonar el diálogo.
Los ensayos nucleares y con misiles han aumentado las tensiones en la península coreana y en el sureste asiático, por el temor a que el Gobierno norcoreano pueda desarrollar misiles balísticos con capacidad para alcanzar el territorio continental de Estados Unidos.