MADRID 29 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Corea del Sur ha convocado este jueves por la mañana a un representante de la Embajada japonesa para presentar una protesta por la reciente visita de la ministra nipona de Defensa, Tomomi Inada, al polémico templo de Yasukuni, en Tokio, donde se rinde homenaje a los militares muertos durante las guerras imperialistas de la primera mitad del siglo XX, entre los que se encuentran varios destacados criminales de guerra.
El director general de Asuntos para el Noreste de Asia surcoreano, Chung Byung Won, ha presentado formalmente su queja ante Kohei Maruyama, ministro en la Embajada japonesa en Seúl, quien ha sido llamado a presentarse en la sede del Ministerio este mismo jueves.
"El Gobierno no puede esconder su condena por la visita de políticos japoneses claves al templo de Yasukuni, que glorifica la imposición colonial y la agresión de Japón en el pasado y ensalza a criminales de guerra", ha señalado el Ministerio en un comunicado, recogido por la agencia surcoreana de noticias Yonhap.
Seúl ha señalado que con esta visita "el Gobierno nipón deja claro una vez más que Japón no podrá recuperar la confianza ni de sus vecinos ni de la sociedad internacional" y que sólo lo hará "cuando los líderes del país se enfrenten de forma correcta a su historia y presenten un sincero arrepentimiento".
La ministra, que ha visitado el polémico templo en numerosas ocasiones en el marco de los aniversarios de guerra, ha presentado sus respetos a los caídos en el conflicto en la que ha sido su primera visita desde que asumió la cartera el pasado mes de agosto, según ha confirmado la agencia nipona de noticias Kiodo.
En un comunicado diferente, el Ministerio de Defensa se ha sumado a las críticas y ha denunciado la visita de Inada al santuario sintoísta. "Condenamos en los términos más enérgicos la visita de la ministra de Defensa a Yasukuni, visita que embellece la agresión de la guerra de Japón contra sus países vecinos y honra a criminales de guerra", ha señalado.
El paso de Inada por el templo ha tenido lugar un día después del histórico encuentro entre el primer ministro japonés, Shinzo Abe, y el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, en Pearl Harbor, 75 años después del ataque aéreo que llevó a Washington a entrar en la Segunda Guerra Mundial.
La ministra, que formó parte de la delegación que acompañó a Abe en esta cita, ha señalado que "Japón y Estados Unidos, que se enfrentaron en las más duras batallas, se encuentran ahora en una fuerte relación de alianza".
"He presentado mis respetos (a los caídos) para informar sobre esto y con la esperanza de que se construya la paz para Japón y para todo el mundo desde un punto de vista orientado al futuro", señaló tras su paso por Yasukuni.
La relación entre el Gobierno de Abe y el templo ha sido fuente de fricciones diplomáticas entre Japón y varios de sus vecinos asiáticos.
Si bien el 'premier' nipón suele enviar ofrendas cada año, se abstiene de visitar las instalaciones del santuario bélico ante las persistentes quejas de los países de la región y es una de sus delegaciones la que suele acudir en nombre del Gobierno.