MADRID, 10 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Corea del Sur ha aliviado las medidas de vigilancia y cuarentena de personas contagiadas con COVID-19 si muestran síntomas leves con el objetivo de concentrar los recursos médicos en pacientes de alto riesgo, mientras alcanza cifras récord de nuevos contagios.
Así, las autoridades sanitarias han decidido realizar llamadas diarias solo a los pacientes de alto riesgo, en un intento de aliviar la carga de trabajo de los trabajadores sanitarios y funcionarios gubernamentales y hacer frente mejor a las tendencias de la pandemia, puesto que el número de pacientes que actualmente reciben tratamiento en sus domicilios superan los 174.000.
Desde este jueves, los sanitarios únicamente llaman a los pacientes mayores de 50 y 60 años y aquellos con enfermedades subyacentes y otros grupos de alto riesgo, como los que tienen un sistema inmune comprometido. Además, los dispositivos de medición de saturación de oxígeno se distribuirán únicamente a estos grupos de población, mientras que previamente estaban disponibles para todos los que recibían tratamiento domiciliario.
Por su parte, los pacientes de bajo riesgo deberán vigilarse a sí mismos y contactar con los centros sanitarios si empeora su estado. Se les proporcionarán instrucciones para que reciban tratamiento o se acerquen a hospitales si su nivel de saturación de oxígeno cae por debajo del 94 por ciento, según ha recogido la agencia de noticias surcoreana Yonhap.
Las autoridades sanitarias surcoreanas han contabilizado este jueves 54.122 nuevos casos, una cifra récord desde que comenzó la pandemia. El último récord se registró el miércoles, más de 49.500 contagios.
Los casos diarios se han cuadruplicado durante las dos últimas semanas, un crecimiento que las autoridades atribuyen a la variante ómicron del SARS-CoV-2, que ha representado más del 92 por ciento del total de casos de la semana pasada en Corea del Sur. Además, las autoridades han constatado otros 20 fallecimientos a causa de la enfermedad.
Hasta el momento, Corea del Sur ha contabilizado más de 1,1 millones de contagios, incluidos cerca de 7.000 fallecidos, desde que comenzó la pandemia. Por su parte, el 86,1 por ciento de la población surcoreana cuenta con la pauta completa de vacunación, mientras que el 56 por ciento ha recibido también la dosis de refuerzo.