BOGOTÁ, 27 Ago. (EUROPA PRESS) -
La presión sobre el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, para que tome medidas contundentes contra Venezuela por la decisión de su homólogo, Nicolás Maduro, de cerrar la frontera tras un supuesto ataque de paramilitares colombianos a soldados venezolanos, ha aumentado considerablemente en las últimas horas.
La principal causa de enfrentamiento, al margen de los problemas que ha generado la semana de cierre fronterizo, son las masivas deportaciones de colombianos residentes en Venezuela con la excusa de que son quienes generan inestabilidad en el país vecino.
Tanto Santos como su ministra de Exteriores, María Ángela Holguín, han expresado a las autoridades venezolanas su disconformidad con las deportaciones y han exigido respeto a los Derechos Humanos de los migrantes colombianos.
Sin embargo, las deportaciones han continuado. Según el último balance oficial, 1.085 colombianos han sido repatriados, de los cuales 608 han sido trasladados a albergues --tanto en Cúcuta como en Villa del Rosario--, mientras que los demás están en casas de amigos o familiares.
Uno de los primeros en reclamar una reacción firme de la Casa de Nariño ha sido el ex presidente Andrés Pastrana, que ha pedido a Santos que expulse a Venezuela del proceso de paz con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), donde ejerce de país acompañante.
"Colombia debe evaluar seriamente la participación de Venezuela en el proceso de paz como facilitador pues ese gobierno ya no goza de la confianza de los colombianos y no otorga las garantías necesarias", ha dicho en una carta abierta.
Pastrana ha argumentado que Venezuela "está inhabilitado moral y éticamente" para continuar como país acompañante porque "ha violado los Derechos Humanos fundamentales de colombianos y venezolanos", algo "incompatible con la búsqueda de la paz".
"¿Cuál es la contribución que el Gobierno de Maduro está haciendo a la paz de Colombia? ¿Acaso su ejemplo de los recientes días, expulsando compatriotas, arrasando viviendas y militarizando la frontera, es una señal de sus intenciones de paz?", ha cuestionado.
AISLAMIENTO REGIONAL
Además, los partidos Conservador --al que pertenece Pastrana-- y La Unidad --base aliada del Gobierno-- han pedido a Santos que saque a Colombia de la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR), al considerar que no ha mantenido una posición neutral en este asunto.
Ambos se han basado en el 'tweet' que publicó el secretario general de UNASUR, el ex presidente colombiano Ernesto Samper, tras el ataque transfronterizo. "Hace un año denunciamos el peligro de la intromisión de paramilitares colombianos en Venezuela. Hoy se confirma que es una realidad", escribió.
Por su parte, el líder de La Unidad, Roy Barreras, ha solicitado incluso que Santos denuncie a Venezuela ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CoIDH) para que dicte medidas cautelares a favor de los colombianos deportados, según informa 'El Espectador'.
CRISIS BILATERAL
La tensión entre Colombia y Venezuela se ha disparado desde el 19 de agosto por al ataque que tres miembros de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) sufrieron por parte de presuntos paramilitares desde el lado colombiano.
En respuesta, Maduro ordenó hace una semana el cierre de los pasos fronterizos de San Antonio del Táchira y Ureña durante 72 horas, pero el domingo lo renovó y declaró el estado de excepción durante 60 días en algunos municipios de la línea limítrofe.
El dirigente izquierdista ha ordenado igualmente "tomar medidas extraordinarias" para "extirpar la raíz criminal en la frontera" que pasan, principalmente, por mantener "al máximo nivel" la presencia policial y militar en la zona.
El líder 'chavista' ha achacado este aumento de la violencia al incesante flujo de colombianos a Venezuela, algunos de los cuales "vienen huyendo de la guerra", si bien otros "han traído el fenómeno del tráfico de drogas".