SAN JOSÉ 6 Jun. (EUROPA PRESS) -
El gobierno de Estados Unidos canceló el visado de entrada a ese país a 22 inspectores de migración de Costa Rica que trabajaban en el aeropuerto internacional Juan Santamaría de Alajuela --a escasos 15 kilómetros de la capital--, el principal del país. El motivo de esta supresión es el presunto tráfico ilegal de sellos migratorios para los pasaportes que se vendían a costarricenses que residen en Estados Unidos.
Los 22 oficiales denunciados --que suponen casi el 20 por ciento de los inspectores migratorios del aeropuerto-- están acusados por estampar sellos con fechas falsas en los pasaportes para emular movimientos migratorios ficticios desde Estados Unidos a Costa Rica.
Según una investigación del diario local 'La Nación' la embajada de Estados Unidos en San José confirmó a ese medio a través de correo electrónico la anulación de los visados a los 22 funcionarios.
"En cuanto a los oficiales de migración de Costa Rica, aquellos que han vendido sellos con fechas falsas, para simular viajes hacia y provenientes de Estados Unidos y facilitar otros delitos migratorios, califican como inelegibles para tener una visa estadounidense, como participantes en la trata internacional de personas u otros delitos y, si ya tienen una visa estadounidense, esta les será cancelada. La Embajada ha anulado, por este motivo, varias visas en los últimos años", indicó el comunicado de la sede diplomática norteamericana.
Sobre esta actuación el director general de migración, Mario Zamora, felicitó a las autoridades estadounidenses por la sanción impuesta a sus trabajadores. "Tenemos informes de que algunos de ellos se echaban los sellos en la valija (maleta) y se iban a los Estados Unidos a contactar a los ticos --como se conoce en la región a los ciudadanos de Costa Rica--; tenemos informes de que otros hacían el negocio aquí", agregó.
Según un agente de migración que evitó ser identificado, los funcionarios vendían cada sello por sumas que oscilaban entre los 100 y los 150 dólares (74 y 111 euros). "En un solo viaje, y los hacían con frecuencia a los Estados Unidos, contactaban hasta 20" costarricenses, explicó el agente.
Zamora confirmó que la legación de Estados Unidos en Costa Rica informó telefónicamente a cada uno de los 22 oficiales de la cancelación del visado a ese país. Además anunció que en los próximos días "serán llamados a cuentas por los órganos internos de migración" de Costa Rica.
El citado diario afirmó haberse puesto en contacto con los varios de los afectados, cuyos nombres no reveló e informó de que cuatro de ellos confirmaron que el tráfico de sellos era una práctica habitual y que se llevaba produciendo varios años. "La verdad es que en migración el que menos roba alcanza un venado", reconoció uno de los inspectores por teléfono.
Fuentes del aeropuerto Juan Santamaría indicaron asimismo que a pesar de que los 22 inspectores no podrán entrar en el país norteamericano, todos siguen trabajando normalmente en el departamento de migración aunque Zamora ya anunció que se iniciará una investigación disciplinaria y que de ser ciertas estas informaciones serán despedidos "sin responsabilidad patronal".