Las crisis de seguridad y de alimentos dominan la primera reunión entre Biden y Al Sisi

MADRID, 16 Jul. (EUROPA PRESS) -

El presidente egipcio, Abdelfatá al Sisi, y el presidente estadounidense, Joe Biden, han mantenido este sábado en Yeda (Arabia Saudí) su primera reunión desde la llegada del mandatario norteamericano a la Casa Blanca, con la cooperación bilateral y la crisis alimentaria como temas principales.

"La reunión ha abordado aspectos de la cooperación bilateral entre Egipto y EEUU, especialmente para enfrentar las repercusiones de las circunstancias globales relacionadas con la crisis alimentaria y la confusión en el suministro de energía", según el comunicado de la Presidencia egipcia recogido por Al Ahram.

Egipto es el principal importador de trigo del mundo y recientemente, como otros tantos países, ha padecido aumentos en los precios del combustible y los alimentos atribuidos a los problemas de exportaciones causados por la guerra en Ucrania.

Biden y Al Sisi también han discutido maneras de reactivar las paralizadas conversaciones de paz entre israelíes y palestinos, donde Egipto ejerce un papel como mediador. El año pasado, El Cairo negoció un alto el fuego entre Israel y el movimiento islamista palestino Hamás, que gobierna Gaza.

Si bien el contenido de esta conversación no ha trascendido, poco después, el presidente Al Sisi destacó ante los líderes del Consejo de Cooperación del Golfo la necesidad de alcanzar un solución "justa, integral y definitiva" al problema palestino sobre la base de la solución de dos Estados.

En este sentido, Al sisi pidió garantizar el establecimiento de un estado palestino independiente en las fronteras del 4 de junio de 1967 con Jerusalén Este como su capital de una manera que garantice "los derechos legítimos del pueblo palestino a vivir en paz al lado del Estado israelí".

"Esto debería garantizar la seguridad de los pueblos palestino e israelí y proporcionar una nueva realidad para los pueblos de la región, que podría ser aceptada", según el presidente.

El mandatario agregó que esta nueva realidad pondría fin a las "políticas de exclusión" y potenciaría los valores de convivencia y paz.