MADRID 23 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Cruz Roja y la Media Luna Roja intensificarán su campaña contra el virus del ébola en África occidental y la prolongarán hasta hasta 2017, para "poner fin a la epidemia" y ayudar a los que "quieren reconstruir su vida", según ha afirmado la organización este jueves en un comunicado.
"La prioridad es tratar de poner fin a la epidemia, pero también es imperativo asistir a aquellos que quieren reconstruir sus vidas", ha manifestado la directora de Cooperación Internacional de Cruz Roja Española, María Alcázar.
Además de mantener a equipos sanitarios que puedan responder a posibles nuevos casos del virus, Cruz Roja prolongará su campaña contra la enfermedad hasta 2017 para reducir el riesgo de desastre y reforzar el apoyo psicosocial a los afectados.
No obstante, la organización ha alertado de que la ayuda internacional es insuficiente y ha subrayado que la importancia del problema del ébola trasciende las fronteras africanas. "Una epidemia como la del ébola no es solo un problema de África sino un problema global; y no podemos ponerle fin solo con nuestros medios", ha asegurado Alcázar.
Para Cruz Roja, la solución a la epidemia debe pasar por "construir colaboraciones globales, regionales y locales implicando a los gobiernos, sectores públicos y privados, instituciones multilaterales y sociedad civil".
"ESTIGMA SOCIAL"
La organización ha contribuido a enterrar de forma segura a las 30.000 personas que han perdido la vida por el virus en los países afectados de África occidental. El contacto con los cadáveres puede aumentar el riesgo de la propagación del virus. Por ello, además de ayudar a enterrar a los fallecidos respetando las tradiciones locales, Cruz Roja se asegura de evitar el contacto con los cuerpos.
Otro aspecto clave para Cruz Roja es proporcionar apoyo psicosocial a los afectados y sus familiares para luchar contra el "estigma del ébola". La organización ya ha dado ayuda de ese tipo a más de 300.000 personas gracias a más de 10.000 voluntarios.
El comunicado recoge el testimonio de Fatoumata Souma, guineana de 22 años, que ha perdido a 13 familiares por el ébola. Aunque haya superado el virus, Cruz Roja asegura que "sus vecinos no quieren hablar con ella", ni "comprar su hierro y chatarra, de lo que vivía su familia", ni la quieren "contratar en ningún sitio". Para la asociación, después de haber controlado el virus, el apoyo a estar personas es clave para superar el problema.