MADRID, 4 Ago. (EUROPA PRESS) -
Un centenar de personas se ha reunido este miércoles por cuarto día consecutivo en Nueva Delhi para protestar por la supuesta violación y posterior asesinato y cremación forzosa de una niña de nueve años en una localidad situada en el suroeste de la capital, un crimen por el que ya han sido detenidos cuatro hombres.
Las autoridades se han desplazado hasta el lugar de las protestas este miércoles para atender a las demandas de los manifestantes y la familia de la niña, que habría sido violada en grupo, según creen los padres. Los cuatro acusados, de entre 50 y 65 años y entre los que se encuentra un sacerdote hindú, han sido detenidos y encarcelados.
Mientras tanto, el Gobierno de Nueva Delhi ha anunciado una investigación para esclarecer lo ocurrido. Según la información facilitada por los progenitores, la niña acudió a un crematorio en el área de Nangloi a por el agua de una hielera. Allí, sospechan, fue violada, asesinada, y posteriormente incinerada.
"Me llamó el sacerdote y llegué al crematorio, donde mi niña estaba acostada en un banco con su camiseta y bombachos puestos. Sus labios estaban azules y tenía una quemadura en la mano. (...) Me dijeron que si se lo contaba a alguien, iríamos a los tribunales y sufriríamos", relata la madre, según el diario 'The Times of India'.
"Me obligaron a sentarme y comenzaron a incinerarla. Cuando protesté, ya solo quedaban los tobillos. Querían que mi esposo firmara un documento. Él se negó y luego los vecinos acudieron al crematorio, les golpearon y llamaron a la Policía (...). Deben ser quemados como mi hija, que los ahorquen a todos", zanja la madre.
Los acusados aseguran que la niña murió a causa de un accidente producido por un cortocircuito del frigorífico que había en el crematorio. Las autoridades han requisado el aparato para comprobar si sufría algún tipo de deterioro. Según el padre de la niña, el sacerdote justificó la incineración para no hacer de la muerte de la pequeña "un caso policial".
A la espera de que las autoridades se pronuncien, la Policía ha señalado que el estado del cuerpo de la víctima, tras ser incinerado casi en su totalidad, hace muy difícil determinar si fue violada. Los progenitores, pertenecen a la casta de los dalit, o intocables, la más pobre y discriminada de India, por lo que el Gobierno local se hará cargo de la defensa.