Un cuarto de la población de Sudán del Sur vive amenazado por el hambre

MADRID, 12 Ago. (EUROPA PRESS) -

La organización humanitaria Acción Contra el Hambre (ACH) ha advertido del alarmante aumento en el número de atendidos en las regiones sursudanesas de Warrap y Nord Bhar el Ghazal, en un país donde el 40 por ciento de su población está en riesgo de padecer una falta grave de alimentos. Se estima en un millón la cifra de personas que viven en un estado de emergencia próximo a la hambruna.

Según ha denunciado la organización, que opera en la zona desde hace 20 años, el conflicto civil ha agravado la situación, deteriorando las condiciones de vida. Así, la tasa de desnutrición aguda en Nord Bhar el Ghazal supera el 23 por ciento, muy por encima del umbral de emergencia considerado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), que es del 15 por ciento.

Esta situación ha provocado que ACH haya registrado el último año un incremento importante del número de niños de menos de cinco años que necesitan ser atendidos en un centro de nutrición. En 2014, los equipos en el terreno atendieron a más de 10.000 niños en el estado de Aweil Est y Awel du Centre. En el primer semestre de 2015, la cifra ya llega a los 9.000.

Entre mayo y junio, se ha producido un aumento del 30 por ciento en el número de admisiones en el estado de Nord Bahr El Ghazal, con un total de 1.827 niños desnutridos ingresados para tratamiento. La situación es similar en Gogrial de l'Ouest, zona colindante situada en el estado de Warrap, donde la tasa de admisión ha aumentado un 26 por ciento en el mismo periodo.

Una encuesta nutricional realizada el pasado junio ha revelado una tasa de desnutrición aguda global del 29,1 por ciento, la tasa más alta registrada por Acción contra el Hambre en sus evaluaciones en la zona desde 2008.

Con respecto al conflicto civil, el pasado 6 de agosto se inició una nueva fase de negociación en Etiopía para intentar poner fin a la guerra. Con motivo de su visita a África, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, denunció la espiral de violencia que padece Sudán del Sur, un país que declaró su independencia en 2011 y cuyo conflicto civil estalló en diciembre de 2012.

La guerra ha supuesto el desplazamiento de más de dos millones de personas --de ellas, medio millón se ha refugiado en países vecinos-- y la destrucción del país más joven del mundo.